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La petrolera estadounidense ExxonMobil ha anunciado que ampliará su programa de recompra de acciones a 50.000 millones de dólares hasta 2024, lo que supone un aumento significativo respecto al actual programa de 30.000 millones de dólares que finalizaba en 2023.

La recompra incluirá ahora 15.000 millones de dólares de recompra de acciones este año, lo que supondría el mayor total anual desde 2013, según datos recopilados por ‘Bloomberg’. Asimismo, la compañía dijo que espera “duplicar las ganancias y el potencial de flujo de efectivo” para 2027 en comparación con 2019, además de asegurar que está en camino de entregar cerca de 9.000 millones de dólares en ahorros de costos estructurales para el final del año 2023 en comparación con 2019.

Por otra parte, Exxon ha anunciado que gastará entre 23.000 y 25.000 millones de dólares en proyectos energéticos el año que viene, frente a los 22.000 millones de este año. La petrolera también ha aumentado su gasto previsto en proyectos de bajas emisiones de carbono, centrados en la captura y almacenamiento de carbono, los biocombustibles y el hidrógeno, hasta 17.000 millones de dólares hasta 2027, frente a su anterior previsión de 15.000 millones de dólares.

“Los resultados obtenidos hasta la fecha demuestran que vamos por el buen camino”, ha asegurado Darren Woods, consejero delegado de Exxon, “Entendemos nuestro éxito como una ecuación en la que podemos producir la energía y los productos que la sociedad necesita y ser líderes en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de nuestras propias operaciones y también de las de otras empresas”.

La empresa también ha afirmado que, para 2027, “se espera que la producción de exploración y producción aumente en 500.000 barriles equivalentes de petróleo al día hasta alcanzar los 4,2 millones de barriles equivalentes de petróleo al día”. De esta cantidad, más de la mitad procederán de la cuenca del Pérmico estadounidense, Guyana, Brasil y los proyectos de gas natural licuado en los que está invirtiendo la empresa.

Asimismo, Exxon prevé que sus inversiones a corto plazo mantengan la producción en torno a los 3,7 millones de barriles equivalentes de petróleo al día en 2023, suponiendo un precio del Brent de 60 dólares por barril.

Por otro lado, Exxon ha señalado que los impuestos sobre los beneficios extraordinarios impuestos por los gobiernos europeos podrían suponer un impacto de al menos 2.000 millones de dólares hasta finales de 2023. “Dependerá de la aplicación de una legislación específica en cada país”, ha señalado la directora financiera de la petrolera, Kathy Mikells.

Cabe recordar que el pasado noviembre, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, amenazó con imponer un impuesto a las petroleras por las “ganancias inesperadas por la guerra” de Ucrania, al tiempo que las acusaba de “no cumplir con su compromiso de invertir en EEUU y apoyar al pueblo estadounidense”. “No puedo creer que tenga que decir esto, pero dar ganancias a los accionistas no es lo mismo que bajar los precios para las familias estadounidenses”, señaló Biden en su cuenta de Twitter.

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