• Por ahora, la integración de Banco Popular es "muy poco significativa" en los resultados
  • La entidad cántabra matiza que el resultado anunciado aún es "preliminar"
ep ana botin
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín.
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Banco Santander se ha marcado un auténtico 3 en 1 a última hora del lunes. No sólo ha anunciado los detalles de la ampliación con la que reforzará su capital tras la compra del Popular, sino que también ha comunicado su primer dividendo a cuenta de los resultados de 2017 y, además, ha adelantado el resultado obtenido en los seis primeros meses del año.

Esta avalancha informativa recoge que entre enero y junio la entidad presidida por Ana Botín ha ganado 3.600 millones de euros, un 24% más que en el mismo periodo de 2016. Este incremento, recogido en un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) poco antes de las 23 horas, se apoya en un aumento de los ingresos del 7% gracias la mejoría del margen de intereses (+6%) y de las comisiones (+11%), en tanto que los costes han subido un 4%. La entidad matiza que esta información aún es "preliminar" y todavía está sujeta a la culminación de los estados contables y financieros del primer semestre, que serán presentados el 28 de julio.

Las cuentas semestrales son las primeras en las que ya consolida la aportación de Banco Popular, adquirido tras una subasta urgente el pasado 7 de junio. Su impacto, sin embargo, será imperceptible por el momento. "El beneficio neto atribuido de Grupo Santander a 30 de junio de 2017 tras la integración de Banco Popular experimentará una variación muy poco significativa con respecto al importe estimado de 3.600 millones de euros que habría resultado de no haber tenido lugar la mencionada integración", recoge el comunicado enviado a la CNMV.

El Santander calcula que la tasa de mora del Popular es del 20%, un dato que elevará la morosidad del Grupo hasta el 5,4%

En cuanto al negocio bancario, el crédito neto a clientes creció un 1% en los seis primeros meses y los depósitos, un 3,5%. Además, las previsiones del banco también avanzan un descenso del 6% en las dotaciones para insolvencias y una caída de la tasa de mora "ligeramente por debajo del 3,6%", cuando en marzo se situaba en el 3,74%. Aunque en este terreno sí se notará la incorporación del Popular. El banco presidido por Ana Botín eleva la tasa de morosidad esperada en los activos del Popular al 20%, un dato que aumentará la tasa de mora del Grupo hasta el 5,4%.

En cuanto al capital, el Santander comunica que el capital de nivel 1 ordinario (CET1) y el capital total regulatorio a 30 de junio de 2017 eran aproximadamente del 12,2% y del 14,9%, respectivamente. Y la referencia más seguida por el mercado, correspondiente al CET1 “fully loaded”, se estima en el 10,7%. Como precisa la propia entidad, esta estimación del 10,7% asume "la suscripción completa de la ampliación de capital por el importe anunciado de 7.072 millones de euros", puesto que el fin de esta operación no es otro que reforzar las ratios de capital del banco cántabro tras haber adherido los activos del Popular.

En este sentido, el Santander calcula que la entidad presidida hasta hace un mes por Emilio Saracho aportará a su balance 82.000 millones de euros en créditos netos y 65.000 millones en depósitos. No obstante, sigue trabajando en la valoración razonable de los activos del Popular. "De acuerdo con la normativa contable, Grupo Santander dispone de 12 meses, hasta junio de 2018, para estimar de manera definitiva el valor razonable de los activos y pasivos de Banco Popular", precisa la entidad.

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