El grupo energético Cepsa ha obtenido un beneficio neto de 1.100 millones de euros en el ejercicio 2022, un 66,4% más que en los doce meses anteriores. Según la compañía, este resultado ha sido en buena medida “gracias a la recuperación de la demanda y restricciones de oferta en el mercado, lo que se tradujo en una subida de los precios del crudo y el gas natural”.
El resultado bruto de explotación (EBITDA) de 2022 ha sido de 2.939 millones de euros, frente a los 1.815 millones de 2021, lo que supone un incremento del 62 %.
Cepsa ha indicado que esta significativa mejora es consecuencia de la mejora en las condiciones de mercado, los más altos precios del crudo, el incremento de los márgenes de refino y las iniciativas de optimización desarrolladas por la compañía, “que siguieron contribuyendo a mejorar los resultados en todos los negocios y áreas funcionales”.
Asimismo, la inversión ha aumentado un 57 % hasta los 743 millones de euros (473 millones en 2021), en el marco de la estrategia Positive Motion de la compañía. Cabe señalar que es el primer año de aplicación de esta estrategia, cuyo objetivo es convertirse en un líder en movilidad sostenible, hidrógeno y biocombustibles de segunda generación en la Península Ibérica.
La compañía destaca que la desinversión del negocio de Exploración y Producción en Emiratos Árabes Unidos es un paso más hacia el cumplimiento de los objetivos clave de la estrategia de Positive Motion, al permitir a Cepsa maximizar la creación de valor de su división de E&P al tiempo que avanza en su giro verde.
“Como parte de la ambición de convertir a España en una potencia en energía sostenible, Cepsa tiene previsto desarrollar proyectos con una inversión total superior a 3.600 millones de euros en los próximos tres años, de los cuales más del 50 % se destinará a negocios sostenibles. Este importe supone un incremento del 93% respecto a las inversiones realizadas en los últimos tres años”, han explicado desde Cepsa.
La energética también ha logrado una importante reducción de su apalancamiento financiero, pasado de 1,6 veces la deuda neta sobre el EBITDA a cierre de 2021 a estar por debajo de 1,0 vez a finales de 2022. “La compañía sigue contando con una sólida posición de liquidez de 4.000 millones de euros, la cual cubre los vencimientos de deuda hasta 2027”, han añadido.
Maarten Wetselaar, CEO de Cepsa, ha destacado que, en un año de “enorme incertidumbre geopolítica y económica, hemos amortiguado el impacto de la crisis energética en nuestros clientes y permanecemos centrados en nuestra estrategia”.
“Avanzamos a buen ritmo en 2022, firmando fructíferas y ambiciosas alianzas para desarrollar las soluciones de descarbonización que requieren las necesidades energéticas europeas, impulsando continuamente los sectores marítimo, aéreo y del transporte pesado para que se adapten y afronten este reto”, ha señalado.
Por otra parte, la contribución fiscal total de Cepsa alcanzó los 6.654 millones de euros en 2022, lo que supone un récord histórico para la firma. De estos, el 71 %, unos 4.721 millones de euros, fueron impuestos pagados en España.
Adicionalmente, durante 2023, la compañía pagará el impuesto extraordinario que grava a las empresas energéticas en función sus ingresos de 2022, que, en el caso de Cepsa, ascenderá a aproximadamente 325 millones de euros. Este cargo no está reflejado en los resultados de 2022
