El líder del PP, Pablo Casado, ha tardado en comparecer, pero al final ha salido a hablar en la sede del partido en la calle Génova y ha dicho que el resultado cosechado por su formación en este 28-A se debe a la fragmentación del centro-derecha porque, a pesar de haber tenido "más votos" que la izquierda, no hay posibilidad de formar gobierno. Pese a todo, ha descartado dimitir.
"Estas elecciones han coincidido a las puertas de unas elecciones autonómicas, municipales y europeas, y ya dijimos que eso tenía unos problemas a la hora de realizar la campaña. Aunque es algo positivo que en menos de un mes vamos a poder demostrar que si nos unimos, y hay una estrategia de campaña de recordar que la fragmentación solo ha servido para dar el gobierno a otros, es una buena opción para, a partir de ahora, demostrar que este sigue siendo un gran partido que se crece ante las dificultades", ha dicho.
Según Casado, los 'populares' "iremos con la misma ilusión y ambición de futuro, para intentar convencer a los españoles de que somos la mejor opción para el futuro de sus familias y de España".