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Las peticiones semanales de desempleo en EEUU han descendido hasta las 193.000, en la semana del 23 de septiembre, desde las 209.000 registradas en los siete días previos (aunque el dato se ha revisado a la baja desde 213.000), según los datos publicados por el Departamento de Trabajo estadounidense. Esta cifra se ha situado por debajo de las previsiones del consenso, que anticipaban 215.000. De esta forma, las peticiones se sitúan en su nivel más bajo desde abril.

Por estados, los mayores incrementos se dieron en Michigan (+6,102), Georgia (+1,837), Nueva York (+1,709), New Jersey (+1,164) y California (+1,130), mientras que las caídas más acusadas tuvieron lugar en Indiana (-1,103), Arkansas (-386), Kentucky (-295), Virginia (-288) y Oklahoma (-264).

La media móvil de las últimas cuatro semanas se situó en 207.000, bajando desde las 215.750 de la semana anterior.

Con relación a las solicitudes de prestaciones regulares, registraron un moderado descenso hasta 1.347.000, desde las 1.376.000 y mejorando las previsiones del consenso, que anticipaban 1.388.000.

EL PIB SE CONTRAE EN EL SEGUNDO TRIMESTRE

Este jueves también se ha conocido la tercera estimación del Producto Interior Bruto (PIB) de Estados Unidos, que ha disminuido a una tasa anual de 0,6% en el segundo trimestre de 2022, según ha publicado la Oficina de Análisis Económicos. En el primer trimestre, el PIB real se contrajo un 1,6%.

Esta menor disminución de la economía estadounidense es el reflejo de un repunte en las exportaciones, una aceleración en el gasto del consumidor y una disminución menor en el gasto del gobierno federal que fueron parcialmente compensados por una desaceleración en la inversión privada en inventarios, una desaceleración en la inversión fija no residencial y una mayor disminución en la inversión fija residencial. Las importaciones, por su parte, se desaceleraron.

VALORACIÓN DE LOS EXPERTOS

Desde Oxford Economics han destacado que, si bien se espera que la actividad económica general se desacelere en respuesta a la subida de los tipos de interés y al debilitamiento del contexto global, "el bajo nivel de reclamos es un recordatorio de que las condiciones del mercado laboral siguen siendo extremadamente estrictas incluso cuando nos dirigimos hacia una recesión leve el próximo año".

"El desequilibrio entre la oferta y la demanda de trabajadores, que está presionando al alza los salarios, es un factor clave detrás de los planes de la Fed de seguir subiendo agresivamente las tasas de interés. Esperamos que la Fed suba las tasas otros 125 puntos básicos este año", han indicado.

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