El crecimiento de la industria en la Eurozona volvió a ralentizarse en mayo, con un menor ritmo de expansión de la producción, así como de los nuevos pedidos. Además, el sector manufacturero redujo su capacidad de contratación y sus perspectivas de precios. La puntuación del índice PMI manufacturero cayó siete décimas en mayo hasta los 55,5 puntos, según la consultora británica IHS Markit.
De este modo, el resultado cae por quinto mes consecutivo desde que alcanzara su récord histórico en diciembre del año pasado y alcanza mínimos de quince meses. En cualquier caso, continúa por encima de la media a largo plazo de la serie de 51,9 puntos.
A nivel sectorial, el ritmo de crecimiento se ralentizó tanto para los bienes de consumo, como de capital e intermedios. Por países, ocho de las regiones cubiertas por el estudio registraron una mejora de las condiciones operativas en mayo. Países Bajos (60,3 puntos), Austria (57,3 puntos), Alemania (56,9 puntos) e Irlanda (55,4 puntos) lideraron la lista que cerraron Grecia (54,2 puntos), España (53,4 puntos) e Italia (52,7 puntos).
La producción manufacturera y los nuevos pedidos aumentaron de nuevo en el quinto mes del año, aunque bajo el ritmo más débil del último año y medio. Las perspectivas en el sector se mantuvieron positivas, con los empresarios asegurando que la producción será mayor en los próximos doce meses, no obstante, el grado de optimismo cayó a niveles de septiembre de 2016.
Las restricciones a la capacidad se mantuvieron en mayo tanto en las empresas manufactureras, como para sus proveedores. Así, los pedidos pendientes aumentaron por trigésimo mes consecutivo, aunque al menor ritmo de los últimos diecinueve meses, alargando los plazos de entrega a tiempos pocas veces vistos en el histórico del estudio. Ello animó a las compañías a seguir aumentando su capacidad de contratación, aunque bajo una tasa de crecimiento mínima de los últimos catorce meses. Solo Francia, España y Grecia presentaron un ritmo más rápido de contratación que en abril.
En mayo ,la tasa de inflación de los precios de los insumos se mantuvo fuerte, que se aceleró por primera vez desde enero del año pasado. Sin embargo, el precio de venta se ralentizó a hasta su mínimo de cinco meses. Alemania registró el mayor aumento tanto en costes como en precios de venta.
“El sector manufacturero de la zona euro registró su expansión más débil de quince meses en mayo. Parte de la debilidad puede haber estado relacionada con un número de días festivos más alto de lo normal durante el mes, pero los riesgos parecen inclinarse hacia un crecimiento que se mantendrá tenue o incluso se ralentizará aún más en los próximos meses. La disminución de las ventas para exportaciones ha sido un lastre clave para el crecimiento de la producción y de los nuevos pedidos, ya que el estudio de mayo indica que los nuevos pedidos para exportaciones se incrementaron a la tasa más débil de casi dos años, en parte debido a la apreciación del euro aunque también se informó de una demanda debilitada para las importaciones de mercados clave, en particular los Estados Unidos.", explica Chris Williamson, Economista Jefe de IHS Markit.
