La inflación de Reino Unido sigue ralentizándose. En el mes de julio la subida de los precios se ha relajado al 6,8%, gracias a las caídas del gas y la electricidad al entrar en vigor la reducción del tope del precio de la energía, de forma que ya es el segundo mes consecutivo en el que el Índice de Precios al Consumo (IPC) marca esta tendencia.
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"La inflación se ralentizó notablemente por segundo mes consecutivo", ha destacado Matthew Corder, subdirector de precios de la Oficina Nacional de Estadística británica (ONS, por sus siglas en inglés). Los precios han tocado su nivel más bajo desde la primavera de 2022, al caer desde el 7,9% registrado el pasado mes de junio al 6,8% del séptimo mes del año, pero aún siguen estando muy por encima del objetivo fijado por el Banco de Inglaterra (BoE) del 2%.
Esto se debe a que a principios de julio se redujo el tope de precios de la energía en Reino Unido hasta 2.074 libras al año para un hogar tipo, por debajo de la garantía de precios de la energía del Gobierno de 2.500 libras al año. Según la ONS, los precios del gas han caído un 25,2% entre junio y julio de este año, pero han subido un 0,1% entre los mismos dos meses de hace un año. Los precios de la electricidad, por su parte, han retrocedido un 8,6% entre junio y julio de este año, pero se han elevado un 0,4% entre los mismos dos meses de hace un año.
Pese a todo, la mejora es notable, y es que cabe recordar que los precios tocaron máximos en octubre, cuando alcanzaron el 11,1%. "Aunque sigue siendo elevada, la inflación de los precios de los alimentos también ha vuelto a disminuir, en particular la de la leche, el pan y los cereales", ha remarcado Corder.
En concreto, los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas han subido un 0,1% entre junio y julio de 2023, frente a un repunte del 2,3% entre los mismos dos meses de hace un año. Así, la tasa de inflación anual de los alimentos y las bebidas no alcohólicas se ha situado en julio en el 14,8%, frente al 17,3% registrado hasta junio.
Corder también ha destacado que la inflación subyacente se ha mantenido "sin cambios en julio, con el descenso del coste de los bienes compensado por el aumento de los precios de los servicios". Esta tasa, que excluye la energía, los alimentos, el alcohol y el tabaco por su elevada volatilidad, se ha situado en julio el el 6,9%, igual que en el mes anterior, después de que la tasa anual del IPC de bienes se haya desacelerado del 8,5% al 6,1%, mientras que la tasa anual del IPC de servicios ha aumentado levemente del 7,2% al 7,4%.
Tras conocer estas cifras el canciller británico, Jeremy Hunt, ha afirmado que la "acción decisiva" del Gobierno ha reducido la inflación. "La acción decisiva que hemos tomado para atajar la inflación está funcionando, y la tasa se sitúa ahora en su nivel más bajo desde febrero del año pasado", ha destacado.
"Pero aunque la subida de precios se está ralentizando, no hemos llegado a la meta", ha confirmado el ministro de Finanzas, que apunta que deben ceñirse a su "plan de reducir la inflación a la mitad este año y situarla de nuevo en el objetivo del 2% lo antes posible".
BUENAS NOTICIAS
Según Naeem Aslam, jefe de inversiones en Zaye Capital Markets, los datos de inflación "han traído buenas noticias muy necesarias para la economía y han confirmado que la política monetaria estricta está funcionando ahora que la inflación está en caída libre". Y ha añadido que esta noticia en particular "es realmente música para los oídos de muchos británicos que han estado luchando con la crisis del coste de vida y viviendo bajo la amenaza de una profunda recesión".
Aunque ahora, dice, "la pregunta principal para muchos inversores es qué va a hacer el Banco de Inglaterra con esta noticia". En su opinión, "lo que importa ahora para la libra y para los mercados es la dirección de las tipos de interés", y es que muchos creen que el BoE ya está llegando a su punto máximo. Aunque Aslam pide "no perderse en todo el ruido y centrarse en la realidad, que es que la lectura de la inflación sigue siendo mucho más alta que la del Banco de Inglaterra".
Por su parte, los expertos de Pantheon Macroeconomics siguen pensando que la tasa general de inflación promediará alrededor del 4,7% en el cuarto trimestre y oscilará entre el 2% y el 3% durante la mayor parte de 2024, "lo que permitirá que el BoE detenga pronto su ciclo de ajuste y luego comience a reducir los tipos, lentamente, el próximo año". "Seguimos esperando que la tasa bancaria suba 25pb a 5,50% en septiembre, y luego baje alrededor de 100pb en el transcurso de 2024, con la primera reducción en mayo", comentan.
