El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado sus previsiones de crecimiento del PIB de España para los siguientes cursos, y ahora espera un avance del 1,5% en 2023, que se encuentra 4 décimas por encima de su anterior estimación, mientras que prevé un crecimiento menor para 2024, del 2%, frente a su anterior proyección del 2,4%.
El organismo multilateral muestra ahora una visión más optimista para la economía española en el presente año que la que tenía cuando realizó la anterior estimación, en enero, y también en relación al crecimiento del 1,2% que esperaba en octubre del año pasado. En lo que respecta a 2024, la estimación actual de crecimiento del 2% en inferior tanto a la de enero (2,4%) como a la de octubre (2,6%).
En lo que respecta a la inflación, espera que los precios reduzcan su crecimiento al 4,3% en el presente año, para seguir con su desescalada en 2024 hasta el 3,2%. Según esta previsión, la tasa de desempleo caería en 2023 tres décimas desde el 12,9% al que cerró el pasado año, y llegaría a finales de 2024 en el 12,4%.
El FMI destaca que la previsión para España tiene en cuenta "las medidas de apoyo relacionadas con la energía, un aumento legislado en las pensiones y medidas de ingresos legisladas", y asume "medidas de apoyo energético por valor de 1% del PIB en 2023".
Además, para este año se espera una mejora del 1,6% en la demanda doméstica, seguida de un incremento del 1,9% el año que viene, mientras que el gasto privado crecerá, según la misma estimación, un 1,1% en 2023 y un 1,7% en 2024.
El Ministerio de Asuntos Económicos destaca que, según las estimaciones del FMI, "la economía española crecerá más del doble que la de la Unión Europea y por segundo año consecutivo el crecimiento previsto será casi el doble que el de los principales países de la zona euro".
"Este buen comportamiento de la economía española se mantendrá durante el próximo año, superior también al de la zona euro", agrega.
Además, subraya que "respecto a la inflación, el FMI estima que seguirá reduciéndose hasta el 4,3%, un punto menos que la prevista para la zona euro, lo que permitirá mantener el diferencial positivo y seguirá favoreciendo la competitividad de las empresas españolas".
