El PNV suaviza su 'no' a los Presupuestos y condiciona su apoyo a un "gesto" del Gobierno en Cataluña

El PNV dice que todavía queda "una semana" y que eso "es mucho tiempo en política" para negociar y llegar a un acuerdo

"Nuestro apoyo a los Presupuestos depende de la posición del Gobierno en Cataluña". Así de tajante se ha mostrado el dirigente vasco en una entrevista en la Cadena Ser, al ser preguntado sobre el trámite parlamentario de los PGE y sobre si el PNV mantiene su postura. El debate de las enmiendas a la totalidad se celebrará la semana que viene, concretamente los días 25 y 26 de abril, y el Ejecutivo que dirige Mariano Rajoy necesita recabar apoyos en otros grupos para evitar que el Congreso eche abajo las cuentas públicas a la primera de cambio.

El PNV ha sido su principal objetivo, dado que el año pasado los votos de sus cinco diputados fueron vitales para sacar adelante los Presupuestos, pero en esta ocasión los nacionalistas vascos se niegan a ceder por la situación en Cataluña. "El 155 lo hemos vivido como una agresión también a nosotros", ha dicho Ortuzar, que ha insistido en que van a "censurar" todo lo relacionado con la intervención que supone este artículo de la Constitución.

Según ha dicho, la condición para empezar a negociarlos, ya que "a día de hoy no ha habido ni una conversación sobre los Presupuestos", es que el Gobierno cambie su actitud con Cataluña. "Son más que unos Presupuestos, y nosotros hacemos un análisis de la política catalana y del 155 como un hecho muy grave, muy doloroso, que no entendemos. Lo hemos vivido como una agresión, no nos gusta", ha remarcado Ortuzar, que ha recordado que todavía queda "una semana" y que eso "es mucho tiempo en política" para negociar y llegar a un acuerdo.

"Vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para que haya estabilidad", pero hay que dar "soluciones políticas a problemas políticos". "Necesitamos saber cuál es la posición del Gobierno español ante un próximo panorama político en Cataluña" para decidir, ha dicho el dirigente vasco. En concreto, ha señalado que para que el PNV apoye la tramitación de los Presupuestos "hay que facilitar las cosas, allanar caminos, no poner obstáculos, como hasta el momento" en Cataluña. "Queremos que haya gestos que ayuden a que haya gobierno en Cataluña", ha remarcado. En este sentido, ha dicho confiar en que "antes del día 22 de mayo, momento en el que expira el plazo para la convocatoria de nuevas elecciones", haya un nuevo Govern porque "percibimos en los partidos catalanes la necesidad de tener cuanto antes un gobierno".

Eso sí, Ortuzar también ha señalado que no ve normal que tanto el Gobierno como Ciudadanos lo fíen todo al PNV y descarguen sobre los nacionalistas vascos toda la responsabilidad. "Tanto el partido del Gobierno como los de la oposición han situado estos Presupuestos como una especie de prueba de algodón del futuro de la legislatura, y descargar toda esa responsabilidad sobre el PNV para nosotros es incómodo. Nadie puede echar la mochila del futuro político de España sobre la espalda del PNV", ha afirmado.

OTRAS CONDICIONES PARA NEGOCIAR

Asimismo, Ortuzar ha asegurado que esa no es la única condición para que el PNV se siente a negociar. "Hay cosas que cambiar si entramos a negociar, cosas en el desarrollo autonómico que es incomprensible que no estén en manos vascas: prisiones, seguridad social, infraestructuras, transportes, banca, bastantes materias. Pero eso lo tiene que hacer el gobierno vasco, no el PNV", ha explicado.

Y el presidente del PNV también ha criticado a Ciudadanos porque "tiene una visión estrecha de España, incompatible con la pluralidad". "Si hay una cosa en Euskadi que nos une a todos son nuestros derechos históricos, la foralidad, el concierto económico, y Rivera y su partido se lo quieren cargar. Le tenemos miedo y lo vamos a combatir", ha asegurado Ortuzar, que se ha mostrado preocupado por el ascenso de la formación naranja en las encuestas. "Que la alternativa al PP sea una opción más de derechas, más centralista, más dura, más de palo que de zanahoria es preocupante, la izquierda se lo tiene que mirar", ha concluido.