Santiago Bernabeu
Santiago Bernabéu.

La vuelta de la final de la Copa Libertadores 2018 entre River Plate y Boca Juniors se jugará en el estadio del Real Madrid, el Santiago Bernabéu, el próximo domingo 9 de diciembre a las 20:30 horas.

La CONMEBOL, la RFEF, la FIFA y también el Real Madrid ya han dado su visto bueno para que se dispute el partido en el feudo blanco, según As, y a la espera del visto bueno del Gobierno de España través del Ministerio de Cultura y Deporte pero este paso tan sólo se trata de una mera formalidad. También se prevé que el árbitro probablemente será español.

Ante la imposibilidad de la Confederación Americana de concretar una nueva sede en algún país Latinoamericano que no fuese Argentina, la FIFA decidió acudir este jueves por la mañana a al RFEF para proponerle acoger el encuentro y desatascar la situación ante la urgencia de la situación. De hecho, el ganador de la Copa Libertadores deberá conocerse antes del 11 de diciembre, cuando el campeón deberá estar en Emiratos Árabes para disputar el Mundial de Clubes de la FIFA, el torneo que enfrenta a los mejores equipos de cada continente.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dio su visto bueno por la tarde y anunció, a través de su cuenta de Twitter que la Policía y "los servicios implicados, con amplia experiencia en dispositivos de este tipo, trabajan ya en el despliegue necesario para garantizar la seguridad del evento".

La posibilidad de jugar en España, sin embargo, llegó después de que se descartase a Asunción (Bolivia), Doha (Qatar) y Miami (EE.UU.), como posibles escenarios para acoger la final de la Libertadores. Tras varias llamadas en el más alto nivel en las que intervino incluso el presidente argentino, Mauricio Macri, quien además ha sido expresidente del Boca Juniors, los dos clubes aceptaron la propuesta para jugar en el estadio del Real Madrid, que ofreció la cancha madridista a la FIFA tras las gestiones de Luis Rubiales.

El presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, ha dado las gracias a Rubiales por su mediación, mientras que Gianni Infantino, responsable de la FIFA, ya ha confirmado que acudirá al Paseo de la Castellana para presenciar el partido.

Durante las fechas que se dispute la final, el Real Madrid estará en Huesca, disputando un encuentro liguero., por lo que no se verá alterado en ningún momento el calendario de sus partidos.

El coloso blanco ha gustado más a la Conmebol que Doha, otra de las opciones, pese a que Qatar estaba dispuesta a poner sobre la mesa 14 millones de euros a repartirse entre los finalistas para llevarse allí el espectáculo. Ahí sería donde entra la buena relación que, a priori, tiene Florentino Pérez con los presidentes de los dos clubes argentinos.

Disputar la vuelta de la final en un estadio como el Bernabéu y en un país (y una ciudad) como España y Madrid, en la que se han registrado 71.000 argentinos censados, garantizará una alta asistencia de espectadores argentinos a pesar de la lejanía.

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