trump 20200728122630
Donald Trump.

Nuevo giro de 180 grados en apenas una hora de reloj. Justo después de que Donald Trump abandonara la mesa de negociación para un nuevo plan de estímulos, el actual presidente de EEUU vuelve a urgir al Congreso través de su perfil de Twitter que lo apruebe cuanto antes, aunque a su medida.

"Si me piden firmar un paquete de medidas que incluya cheques de ayudas de 1.200 dólares para nuestros ciudadanos inmediatamente, lo firmo ya, ¿Me estás escuchando, Nancy?", así se expresó Trump en la noche del martes dirigiéndose abiertamente a Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de los Representantes de los EEUU.

En un tuit posterior, Trump se refirió a otras medidas que apoyaría para relanzar industrias concretas como la de las aerolíneas o los pequeños negocios, pero concediéndoles una financiación menor que la propuesta en un primer momento por los demócratas.

UNA HORA ANTES ABANDONABA LAS NEGOCIACIONES

Una hora antes, Trump daba por terminadas las negociaciones y mandaba a Wall Street al rojo: "He dado instrucciones a mis representantes para que dejen de negociar hasta después de las elecciones".

Pero, ¿cuál es el motivo en el que se refugió Donald Trump? Pues, según palabras literales que Nancy Pelosy, "no está negociando de buena fe". Los demócratas ofrecen un plan de estímulos de 2,4 billones de dólares, una cifra que para Trump nada tiene que ver con la lucha contra el Covid-19.

Trump afirma que lo único que busca Pelosy con esta cantidad es "rescatar a los estados demócratas mal administrados y con alto nivel de delincuencia". Los republicanos habían hecho una contra-oferta de 1,6 billones de dólares.

No será hasta después de las elecciones, -"inmediatamente después de que gane", ha dicho Trump-, cuando los republicanos vuelvan a poner las ayudas encima de la mesa. "Aprobaremos un importante proyecto de ley de estímulo que se centre en los estadounidenses trabajadores y las pequeñas empresas", ha añadido.

El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, llevan varios días con las negociaciones, unas negociones que estaba previsto que continuaran hoy. Sin embargo, Trump ha pedido a Mnuchin que se concentre "a tiempo completo en aprobar a mi destacada nominada a la Corte Suprema de los Estados Unidos, Amy Coney Barrett".

SORPRESA ENTRE LOS EXPERTOS

La decisión inicial de Trump pilló por sorpresa a todo el mundo. Los expertos vaticinaban que el acuerdo estaba más cerca que nunca. "Durante el fin de semana, el presidente Trump instó a ambas partes a llegar a un acuerdo. Está claro que el líder de EEUU quiere sacar titulares positivos en las últimas semanas antes de las elecciones presidenciales", explicaban los analistas de CMC Market tras los avances de los últimos días.

La cancelación de las negociaciones eran tan solo una de las muchas contradicciones a las que nos tiene acostumbrados Trump. Hace tan solo tres días que el propio presidente tuiteó desde su perfil personal que "nuestro gran EEUU quiere y necesita estímulos". Unos estímulos para los que pedía "trabajar juntos".

También han caído en saco roto las palabras del presidente de la Fed, Jerome Powell, de este mismo martes. El líder de la Reserva Federal ha hecho un llamamiento a demócratas y republicanos para que se pongan de acuerdo. Ha alertado de que la falta de estímulos pone en riesgo la recuperación económica.

"La recuperación será más fuerte y más rápida si la política monetaria y la política fiscal siguen trabajando codo con codo hasta que la economía esté fuera de peligro", ha asegurado Powell.

Antes incluso de conocerse las intenciones de Trump, Powell ha advertido de que retroceder en lo que respecta a las ayudas fiscal y monetaria pone en riesgo el impulso y puede provocar una recesión adicional que se parecería a una recesión más tradicional y, por tanto, más difícil de recuperar. “La debilidad se alimenta de la debilidad”, ha matizado el presidente de la Fed.

Noticias relacionadas

contador