Merlin Properties ha presentado los resultados correspondientes al primer semestre de 2022, en los que ha obtenido un beneficio neto de 491,6 millones de euros, lo que supone un incremento del 158% respecto al mismo periodo del año anterior.
En cuanto a los ingresos totales, éstos han sido de 226,6 millones de euros, incluyendo rentas brutas de 222,6 millones, un 8,3% superiores a las del primer semestre de 2021.
El EBITDA ha sido de 165,8 millones de euros, un 21,7% más que hace un año.
El beneficio operativo (FOO) se ha situado en los 157,5 millones de euros, un crecimiento del 19,5% respecto a los primeros seis meses de 2021, equivalentes a 0,34 euros por acción.
El valor bruto de los activos se ha situado en 11.390 millones de euros, un crecimiento del 1,2% en términos comparables, impulsado principalmente por la logística, que creció un 3,6%. El valor neto ha alcanzado los 8.035 millones de euros, con un incremento del 10% respecto al primer semestre del año 2021.
Con la venta de la cartera de las sucursales de BBVA, la compañía ha reducido el nivel de apalancamiento hasta el 27,4%, "tras el repago de 2.068 millones de euros de deuda bruta ,entre los que se encuentran 670 millones del préstamo hipotecario de la cartera de BBVA, 850 millones de deuda sindicada y 548 millones de la cancelación del bono de 2022".
Como consecuencia de la venta de esta cartera, el 18 de agosto repartirá un dividendo extraordinario de 0,75 euros por acción. Además, de cara al dividendo ordinario, han revisado su estimación para 2022 de 0,40 euros a 0,42 euros por acción, "sujeto a la decisión y aprobación por parte del consejo de administración de la compañía".
