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Planta de AlmirallALMIRALL - Archivo
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Almirall ganó 4,3 millones de euros en 2022 frente a las pérdidas de 40,9 millones de 2021. El resultado neto normalizado (que incluye partidas extraordinarias) se situó en 33,5 millones frente a los 81,4 millones de 2021 (-58,8%).

En el periodo, los ingresos totales de la compañía farmacéutica han alcanzado los 866,5 millones de euros, un 6,7% más que en el año anterior. Por su parte, el Ebitda ha alcanzado los 198,3 millones, un 15,8% menos que en todo el 2021. Esto se debe, según ha explicado Almirall, al aumento de la inversión en I+D y de los Gastos Generales y de Administración relacionados con los recientes y próximos lanzamientos, así como por el descenso de las ventas en EEUU.

En este sentido, remarca que la inversión en Investigación y Desarrollo fue de 103,2 millones de euros, aumentando como se esperaba hasta alcanzar el 12% de las Ventas Netas Core, impulsada por la inversión en estudios para lebrikizumab, Klisyri (tirbanibulina), así como en la adquisición de activos en fases iniciales, como el anti IL1-Rap y el IL-2 mu-Fc.

Los Gastos Generales y de Administración fueron de 409,7 millones de euros, un 4,3% más, debido al apoyo a los recientes lanzamientos de Wynzora y Klisyri en Europa, y al despliegue de Ilumetri en nuevos países.

La compañía destaca que cerró 2022 con "un balance saneado y una sólida posición de liquidez", con una deuda neta de 0,8x sobre Ebitda.

Almirall se muestra satisfecha por haber alcanzado sus estimaciones financieras para 2022, "con un buen rendimiento operativo impulsado por el excelente momento de su negocio de Dermatología Médica en Europa". Destaca que su estrategia, centrada en la Dermatología Médica, le sitúa "en una buena posición a medio y largo plazo".

De hecho, la farmacéutica espera que sus motores del crecimiento "mantengan su trayectoria durante 2023", ya que la compañía seguirá apoyando estos productos clave al tiempo que se centra en lanzamientos a corto plazo, como el biológico lebrikizumab.

Asimismo, esperan que Ilumetri siga logrando buenos resultados "gracias a la contribución de los lanzamientos en nuevos países", y Almirall también espera que los lanzamientos de Klisyri y Wynzora en Europa "sigan impulsando tendencias positivas durante el año".

"Almirall está firmemente comprometida con la creación de valor para el accionista a largo plazo, y se espera que su crecimiento se acelere en los próximos años con los lanzamientos recientes y futuros", ha remarcado la compañía en la nota de resultados, en la que ha informado que propondrá a la Junta General de Accionistas un dividendo de 0,19 euros por acción para su aprobación el 5 de mayo de 2023.

La firma pone en valor, además, su "buena calificación crediticia, reflejo de su saneado balance", lo que da a la dirección la flexibilidad necesaria en la coyuntura actual para "seguir buscando adquisiciones y oportunidades de obtención de licencias que se ajusten a su estrategia corporativa".

"El Consejo de Administración de Almirall valora muy positivamente la evolución, el desempeño y el impulso de la compañía hacia sus prioridades clave en los últimos meses. Por ello, ha pedido a Carlos Gallardo que continúe como CEO y ha suspendido por el momento, la búsqueda de un nuevo CEO", ha indicado. Carlos Gallardo ha aceptado, y también continuará en el cargo de presidente del Consejo de Administración. Además, Almirall ha comunicado que el Consejo creará un nuevo Comité de Gobernanza para "controlar y equilibrar la posición del presidente-CEO".

¿QUÉ OPINAN LOS ANALISTAS DE LAS CUENTAS?

Jefferies destaca que las ventas de Almirall de 2022 se han situado "justo por encima del consenso" y que los beneficios mejoran.

"Las ventas se sitúan un 1% por encima de lo estimado, con Ilumetri y Klisyri como motores clave del crecimiento por encima de nuestra estimaciones", comenta. Sin embargo, subraya que Seysara sigue "débil". El margen bruto estuvo en línea y se registró un menor gasto de ventas, generales y administrativas, lo que llevó a un EBITDA superior en un 3% a las previsiones.

Bankinter aprovecha los resultados para recortar el precio objetivo y la recomendación de Almirall

"Seguimos confiando a medio y largo plazo en la cartera de dermatología, con la aprobación en la UE del lebrikizumab para la dermatitis atópica en el segundo semestre", comentan estos expertos.

Jefferies tiene un consejo de 'comprar' para Almirall, con un precio objetivo de 16 euros, lo que implica un potencial de revalorización del 83% desde lo niveles actuales de cotización.

Bankinter, sin embargo, se muestra menos positivo que Jefferies. Se refiere a los resultados del cuarto trimestre estanco y subraya que, aunque las cifras son mejores de lo previsto en EBITDA y EBIT, decepcionan en beneficio neto a causa de un ajuste negativo en valoración de activos financieros en el periodo. Almirall perdió 6,6 millones en el cuarto trimestre frente a los -1,5 millones en el cuarto trimestre de 2021 y a la estimación del consenso de +18,1 millones. El beneficio neto normalizado quedó en 800.000 euros (-96%).

Estos expertos añaden que la compañía cumple con las guías de 2022 (crecimiento de ventas de un dígito porcentual medio, EBITDA 190/210 millones), mientras que las guías de 2023 "describen un año de transición con crecimientos moderados, en línea con lo que anticipan otras farmas".

Bankinter aprovecha para recortar el precio de Almirall hasta 10 euros desde 11 euros y la recomendación a 'neutral' desde 'comprar'. "Además de la caída de resultados, y desde un punto de vista táctico, el carácter defensivo del sector farma es un aspecto desfavorable en el contexto actual de inversión", indica.

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