Durante el debate parlamentario en Grecia, el ministro de Trabajo, Panos Skurletis ha confirmado que el Gobierno tiene entre sus prioridades la restauración de los convenios colectivos, aumentar el salario mínimo y la protección a los trabajadores. A pesar de las advertencias de sus socios europeos, principalmente de Alemania.
"La prioridad inmediata es la negociación social"
Los avisos a Syriza sobre algunas de sus medidas más polémicas que han llegado desde Europa no han servido para hacer cambiar de opinión al nuevo gobierno. El ministro de Trabajo ha asegurado que mantendrán sus planes de activación del diálogo social.
"La prioridad inmediata de nuestro Gobierno es la negociación social con sindicatos, patronales y autoridades locales para crear un plan general que nos permita luchar contra el fenómeno del trabajo ilegal", ha afirmado en sede parlamentaria, Skurletis. Añade que la Inspección de Trabajo griega utilizará "mecanismos de control efectivos".
En cuanto al salario mínimo, el titular de la cartera ha destacado que tiene previsto aumentar el salario mínimo hasta los 751 euros, lo hará progresivamente y mediante un convenio colectivo de ámbito nacional, sin distinciones por edad.
"El despido a bajo coste sólo sirve para aterrorizar a los trabajadores"
Skurletis ha anunciado una reforma de la ley sindical que devuelva la representación a los trabajadores y “el pleno respeto a su autonomía”, limitar los contratos temporales o a tiempo parcial, buscarán fomentar el papel de las agencias públicas de fomento de empleo, en detrimento de las empresas de trabajo temporal, reducir el número de empresas subcontratadas en el sector público y restaurar el domingo como día festivo.
Cree que los despidos a bajo coste, sin aviso previo y sin explicaciones actual solo sirve para “aterrorizar” a los trabajadores, lo que “no juega a favor del trabajador ni de la empresa moderna”.
Además, habrá cambios muy importantes en política migratoria. Según el ministro, existe un "marco legal demasiado rígido" y están estudiando fórmulas para que los inmigrantes que perdieron su trabajo y permiso de residencia durante la crisis, lo recuperen.
La semana pasada, el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, avisó a Grecia de que tenía unos límites a la hora de gestionar su política laboral.
REFORMAS EN EL MERCADO ELÉCTRICO
Otra de las medidas acordadas durante el debate de este martes ha sido la garantía de suministro eléctrico a 300.000 hogares bajo el umbral de la pobreza. En concreto, se suministrarán 300 kilovatios hora al mes.
"El proceso de liberalización del sector ha aumentado los precios"
Además, el ministro de Energía, Panayotis Lafanakis, ha afirmado que paralizará la privatización del organismo de gestión de las redes ADMIE, para apoyar el desarrollo de energías renovables a través de su filial. Ha subrayado que las deudas hacia la compañía estatal superan los 1.700 millones de euros, para poco después atacar el proceso de liberalización del mercado “en lugar de rebajar el coste de la energía, ha aumentado los precios”.
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