- Podría quitarle mucha fuerza a UGT y CCOO
Las elecciones sindicales en el sector financiero, que se celebrarán la próxima semana en las cajas y en enero en los bancos, serán el termómetro perfecto para medir el alcance de Ganemos, el sindicato de Podemos, en materia laboral.
CCOO y UGT serán los dos grandes damnificados tras la repercusión que tendrá en dichas elecciones la implicación de sus cúpulas en el escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid.
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CGT, EL OTRO GRAN BENEFICIADO
La composición de las listas que CGT presentará a las próximas elecciones sindicales es un reflejo del trasvase de afiliados que han sufrido tras el escándalo. No obstante, el responsable de banca de CCOO, Teo Ortiz, se muestra cauteloso sobre el efecto que tendrá en los resultados de los comicios.
“Se notará principalmente en las entidades donde más escándalos ha habido, como Bankia, pero en otras donde no se han destapado demasiados fraudes el efecto será más moderado”, añade el sindicalista en declaraciones a El Confidencial.
UGT CONTRAATACA
UGT ha lanzado un plan de contención consistente en pasearse por “todos los centros explicando todos los pormenores lo que ha ocurrido y las medidas que hemos tomado, dando a conocer que a quien no ha actuado correctamente lo hemos echado”, según el diario.
En este sentido, el responsable del sector financiero de UGT, Sebastián Moreno, añade que “toda la propaganda que sale de la corrupción es algo presente en el ambiente y que nos afecta, pero debemos entender que las elecciones sindicales no son como las políticas. Se trata de candidaturas en las que se presentan compañeros, gente que vive de su nómina del banco, no de tarjetas black, que se conocen por su trabajo en el día a día y que están ahí para solucionar los problemas de los demás”.
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