Sólo tres días le han bastado a 2020 para que los mercados reciban su primera dosis de incertidumbre política, en este caso fruto de las crecientes tensiones entre Estados Unidos e Irán. Y la reacción ha sido de manual, con una subida de todos los activos refugio, lo que en el mercado de las divisas se traduce en un rally del yen contra el dólar y el euro, principalmente. La moneda nipona ha escalado a máximos de nueve semanas contra el 'billete verde', tras conocerse la noticia del asesinato del general iraní Qassen Soleimani en un ataque ordenado por Trump.
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La divisa japonesa se cambia de manos en 107,95 yenes frente al 'billete verde' y, contra el euro, ha alcanzado máximos de tres semanas en los 120,35 yenes. La moneda compartida, por su parte, sigue cediendo terreno desde los máximos de cuatro meses contra el dólar con los que despidió 2019 y recala en los 1,1150 dólares, mientras el índice que mide el desempeño de la divisa de EEUU aguanta por encima de los recientes mínimos de seis meses.
El dólar ha encontrado apoyo en el cambio de año, después de que las malas noticias económicas de Europa y el Reino Unido pesaran sobre la libra y el euro. Las encuestas mostraron que la producción de las fábricas británicas cayó en diciembre al ritmo más rápido desde 2012, mientras que el sector manufacturero alemán se mantuvo en contracción.
La libra esterlina se mantiene estable en 1.3135 dólares, después de bajado desde un máximo de 1,3266 dólares alcanzados el jueves. El euro se aferra a los 1,1150 dólares después de retroceder ante la gran resistencia del gráfico en torno a los 1,1249 dólares.
