ep presidentela generalitat quim torra 20181205111902
El presidente de la Generalitat, Quim TorraEUROPA PRESS

Fuentes socialistas dan por hecho que la reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el de la Generalitat, Quim Torra, con motivo de la celebración del del Consejo de Ministros del 21 de diciembre en Barcelona se va a producir. Moncloa y Govern se hallan ultimando los detalles de este encuentro que, según apuntan desde Rac1, se trasladará al jueves, un día antes. Entretanto, las entidades soberanistas y los Comités de Defensa de la República (CDR) siguen organizándose de cara a las protestas del viernes.

La presión ha crecido durante el fin de semana para que el líder del Govern acuda a la cumbre entre el Ejecutivo central y autonómico, de la que se desconoce el formato final. El exvicepresident de la Generalitat, Oriol Junqueras, afirmaba el sábado, en una entrevista a 'El Periódico', que Esquerra "no romperá los puentes de diálogo" con el Gobierno, mientras advertía sobre las acciones de determinados grupos independentistas, como los CDR, que "con encapuchados ni ensancharemos la base ni haremos la República".

Este lunes, en una carta desde la prisión de Lledoners, el exdiputado Jordi Sánchez, ha instado a la consellera de la Presidencia, Elsa Artadi, y al vicepresident, Pere Aragonés a que allanen el terreno para una reunión el 20 o el 21 de diciembre. Del posible adelanto de la reunión se ha hecho eco la emisora del Grup Godó, aunque fuentes socialistas califican todas estas informaciones de "ruido" de momento. "La propuesta de Sánchez es clara: un encuentro entre los dos presidentes", señalan a Bolsamanía.

Además, el presidente de la patronal catalana, Josep Sánchez Llibre, se ha erigido en mediador y trabaja para cerrar un encuentro previo en terreno neutral. Será en la entrega de los premios anuales Ferrer Salat. Se desconoce si Torra acudirá, pero en cualquier caso, la ministra de Polítrica Territorial, Meritxell Batet, ha descartado que este acto sustituya a una cumbre entre presidentes.

Pero la respuesta oficial de la Generalitat no llega. Si bien el viernes prometieron dar contestación a la misiva de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, antes del sábado, el Govern se está haciendo derrogar, alimentando la especulación en torno a la celebración o no del cónclave, de su contenido, y de la fórmula elegida. El Ejecutivo autonómico sigue buscando la manera de celebrar la reunión con un formato ampliado y hacerla extensible a varios ministros para que también puedan acurrir Artadi y Aragonés, que son quienes han liderado todos los encuentros bilaterales que se han producido desde el verano y más fuerte apuestan por mantener todas las líneas de diálogo abiertas con la Administración central.

Pero Moncloa desea un 'tête-à-tête' presidencial. Cualquier modificación se descarta porque "no es ese el formato habitual", según declaró la ministra de Educación, Isabel Celaá. La también portavoz del Gobierno argumentó que "el formato habitual es que el presidente se traslade a esa comunidad" para reunir al Consejo de Ministros, como sucedió hace dos meses en Sevilla, y allí aproveche el presidente autonómico que es "anfitrión" para "encontrarse" en un encuentro institucional entre ambos, pero sin nadie más.

La última hora la ha protagonizado el portavoz adjunto de JxCat en el Parlament, Eduard Pujol, ha defendido este lunes que la Generalitat y el Gobierno central se reúnan el 21 de diciembre si es para trabajar en un "diálogo útil" que aborde temas de fondo. En rueda de prensa, ha rechazado que este posible encuentro sirva solo como "una reunión protocolaria para hacer una foto", sino que el Gobierno de Pedro Sánchez reconozca y trate al Govern como un actor político.

"Más allá del formato, lo importante es qué temas se ponen sobre la mesa. Proponer temas y abordarlos a fondo. El derecho a la autodeterminación no muerde. No se asusten, se puede hablar. Y el referéndum acordado tampoco muerde", ha ironizado.

1500 POLICÍAS

Y mientras al más alto nivel prosiguen los devaneos sobre la cumbre entre Sánchez y Torra, los cuerpos de Seguridad del Estado ultiman el dispositivo para garantizar la celebración del cónclave ministerial. Según informa 'La Vanguardia', entre Mossos d'Esquadra y Policía Nacional se trasladarán a la zona del edificio de la Llotja de Mar, 1.500 efectivos policiales -1.000 policías autonómicos y 500 nacionales-. Por otra parte, las entidades soberanistas y los CDR han convocado a la población a diversas moviliazciones en señal de protesta.

La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, y el vicepresidente de Òmnium Cultural, Marcel Mauri, han asegurado que las protestas que han convocado por el Consejo de Ministros que se celebrará en Barcelona el 21 de diciembre serán pacíficas, y han reclamado al Gobierno que garantice que actuará de la misma manera.

En una entrevista en Catalunya Ràdio recogida por Europa Press, Mauri ha apuntado que por su parte no habrá ningún tipo de violencia: "Es evidente y la hoja de méritos avala a las organizaciones soberanistas del país". En ese sentido, ha pedido "que sea el Estado español, que es el origen de la violencia que se ha vivido en este país, quien diga que no habrá violencia y que controlará a la extrema derecha".

Noticias relacionadas

contador