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Los índices americanos han cerrado el viernes con ganancias superiores al 1% mientras los inversores siguen rotando sus carteras hacia las acciones más cíclicas. Además, continúa siendo noticia el bloqueo del Canal de Suez, cuya apertura puede demorarse varios días, e incluso semanas en el peor de los casos.
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A nivel económico, el dato más relevante ha sido el índice de inflación PCE, que mide la evolución del gasto de los consumidores y es la medida favorita de la Reserva Federal (Fed) para calibrar las expectativas de inflación.
Los analistas esperaban que repunte hasta el 1,6% en tasa interanual y el dato se ha situado en línea con el pronóstico. El banco central ya ha anticipado que puede subir hasta el 2,4% en tasa interanual en los próximos meses, debido al efecto comparativo respecto al año pasado.
"La Inflación de Consumo sigue una tendencia alcista desde el pasado noviembre, cuando marcaba un 1,2%. Es razonable que esta evolución continúe a futuro en un contexto de mayor crecimiento. Será un repunte pasajero, no estructural", afirman desde Bankinter.
En la escena empresarial, la Fed ha confirmado que los bancos americanos tendrán que esperar hasta el 30 de junio para proponer una normalización de sus dividendos y sus programas de recompras de acciones.
Además, Santander cree que zonas como EEUU y Latinoamérica suponen para la entidad un rendimiento que se sitúa por encima de las expectativas. Además, señalan a México como uno de los mercados principales del grupo, después de anunciar la compra del 8,3% de su filial en este país por 550 millones.
En el ámbito empresarial, este viernes se ha conocido que WeWork debutará en el Nasdaq dos años después de su frustrado salto al parqué. Y lo hará gracias a su fusión con BowX Acquisition, una SPAC (empresa de compra de propósito especial), que elevará el valor proforma de la compañía hasta los 9.000 millones de dólares (7.645 millones de euros).
En otros mercados, la rentabilidad del bono americano a 10 años sube ligeramente hasta el 1,65% tras haber superado la semana pasada el 1,75% y después de haberse celebrado una débil demanda por parte del Tesoro, mientras el euro se aprecia ligeramente un 0,1% y se cambia a 1,1776 dólares.
