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Escabechina en las plazas asiáticas este viernes, después del desplome de más del 4% en Wall Street, que los expertos indican que ha colocado a la bolsa de Nueva York en modo correctivo. La expansión del coronavirus a multitud de países anticipa que su impacto económico será mayor de lo inicialmente estimado, lo que está provocando una huída de los inversores de la renta variable hacia activos más seguros como los bonos y el oro.
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En cuanto a los parqués asiáticos, el descalabro es también mayúsculo y después de varias jornadas en rojo, los índices de Japón, el Nikkei (-3,67%) y el Topix se han llegado a dejar otro 4% esta madrugada. No ha ayudado al pesimismo general la caída del 0,4% de las ventas minoristas niponas de enero, no obstante el dato ha sido mejor que la previsión de una caída del 1,1%, según Reuters.
En la China continental, las bolsas también han notado el impacto del miedo de los inversores con el componente de Shenzhen cediendo un 4,4%, lo mismo que el compuesto de Shenzhen. El compuesto de Shanghai (-3,70) se ha dejado cerca de un 4%, mientras el Hang Seng de Hong Kong lo ha hecho un 2,9%.
El resto de parqués regionales han dejado caídas de más del 3%, en especial en el Kospi de Corea del Sur, donde los casos de Covid-19 superan los 2.000 y los muertos ascienden a 13. Las bolsas de Bombay y Singapur también sufren mordidas de más del 3%.
