La Reserva Federal (Fed) no celebrará su reunión monetaria prevista para esta semana tras la reunión urgente del pasado domingo, en la que lanzó uno de los mayores estímulos monetarios de la historia.
El banco central americano anunció un recorte histórico de los tipos de interés de 100 puntos básicos, hasta dejarlos en el 0%, para intentar paliar los efectos económicos de la expansión del coronavirus en Estados Unidos. Asimismo, anunció un nuevo Quantitative Easing (QE), compra de activos en mercado, de 700.000 millones de dólares, con lo que disparó el bazuca que muchos le pedían (500.000 millones en deuda pública y 200.000 millones en titulizaciones hipotecarias).
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La Fed citó la pandemia como la razón para este programa sin precedentes, ya que "el brote del coronavirus ha golpeado a las comunidades y ha interrumpido la actividad económica en muchos países, incluidos los Estados Unidos".
Estos movimientos se producen después de unas semanas tumultuosas para Wall Street, con caída superiores al 20% desde sus máximos, lo que se encuentra en la definición comúnmente aceptada de mercado bajista.
Se trata de la segunda actuación de emergencia adoptada por el presidente de la Fed, Jerome Powell, en apenas dos semanas tras el recorte de los tipos de interés en medio punto el 3 de marzo, que supuso la primera rebaja de emergencia desde la crisis financiera de 2008.
La Fed también recortó los tipos de la ventana de descuento de emergencia para los bancos en 125 puntos básicos hasta el 0,25%; y prolongó hasta los 90 días el plazo de devolución. Igualmente, rebajó a cero la ratio de requisito de reserva para miles de bancos y mejoró la liquidez en dólares en todo el mundo mediante un programa de swaps en coordinación con los bancos centrales de Canadá, Inglaterra, Japón, la UE y Suiza.
El banco central norteamericano advirtió de que "está preparada para emplear el potencial completo de sus herramientas para apoyar el flujo de crédito para los hogares y empresas y respaldar sus objetivos de empleo y estabilidad de precios".
