Los mercados de la región Asia-Pacífico han cerrado mixtos este lunes. Los inversores se han mostrado dudosos mientras sopesan las consecuencias de la quiebra del Silicon Valley Bank (SVB). El miedo a un contagio se extiende, y por eso los reguladores estadounidenses han intervenido.
Las medidas anunciadas por la Reserva Federal (Fed), el Tesoro y la FDIC han ayudado a apaciguar un poco los ánimos, de tal forma que el índice Hang Seng de Hong Kong ha subido un 1,9%, mientras que el Hang Seng Tech ha repuntado más de un 2,8%.
En la China continental, el Shenzhen Component ha avanzado un 0,44% y el Shanghai Composite, un 0,84%.
Sin embargo, los mercados de Japón han sufrido por la incertidumbre y el temor a un posible contagio. El Topix ha caído un 1,51% para cerrar en 2.000,99 puntos, mientras que el Nikkei 225 se ha dejado un 1,11% y ha acabado en 27.382,96 enteros.
Las bolsas japonesas han liderado las caídas, y es que en Australia, el S&P/ASX 200 solo ha bajado un 0,5% para terminar en 7.108,8 puntos.
El Kospi, por su parte, ha logrado borrar las pérdidas que venía registrando y ha terminado un 0,76% al alza, mientras que el Kosdaq ha subido ligeramente. Las autoridades surcoreanas expresaron durante el fin de semana su preocupación por una mayor volatilidad del mercado a raíz de la quiebra del Silicon Valley Bank.
