Ryanair ha anunciado que sumará más de 500 vuelos hacia y desde su base principal en el aeropuerto londinense de Stansted hasta otoño, con lo que la aerolínea proporcionará unos 100.000 asientos adicionales a destinos como España, Italia, Portugal, Grecia y Francia.
Según ha informado la compañía a través de un comunicado, Ryanair ha agregado estos asientos adicionales en respuesta a las últimas restricciones de vuelo impuestas por el "desesperado Heathrow", que continúa limitando la cantidad de asientos y vuelos disponibles para el público "como resultado directo de su incapacidad para contratar y capacitar a suficiente personal".
Con precios a partir de 29,99 euros, Ryanair "espera dar la bienvenida a miles de familias más durante las vacaciones en sus vuelos de bajo coste desde y hacia el aeropuerto de Londres Stansted". "Mientras el desesperado Heathrow sigue gestionando mal los viajes aéreos, Ryanair y London Stansted seguirán creciendo", ha expresado el CEO del Grupo Ryanair, Michael O'Leary.
El anuncio de la aerolínea de bajo coste coincide con la huelga de tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) convocada por los sindicatos USO y Sitcpla para pedir a la compañía la firma de un convenio colectivo bajo la legislación española. Unos paros de 24 horas que se extenderán hasta el 7 de enero de 2023.
En concreto, piden que se respeten los derechos laborales básicos, tales como 22 días laborables de vacaciones anuales, 14 festivos legalmente establecidos, concreción y reducción de jornada, o el abono de los niveles salariales previos a pandemia, tal y como la Audiencia Nacional ya falló en sus sentencia. También reclaman el fin de la contratación de trabajadores a través de cesión ilegal de trabajadores y el respeto al legítimo ejercicio del derecho a huelga por los trabajadores. Sin olvidar que los sindicatos reclaman la readmisión inmediata de los 11 trabajadores despedidos durante las anteriores convocatorias de huelga de los meses de junio y julio por secundar el derecho constitucional a huelga.
