Hay veces en las que ocurren cosas en el periodismo bursátil que recuerdan un poco al periodismo rosa, concretamente a cuando los famosos van a airear sus desgracias y a ponerse a parir unos a otros a determinados programas.
Nos referimos a esas ocasiones en las que las compañías deciden tirar a la basura sus estrategias prudentes de comunicación y optan por hacer públicas sus guerras porque de alguna manera creen que les beneficia.
Y ahí es donde se equivocan. Porque cuando una empresa se va de la lengua y decide mostrar una imagen conflictiva, los inversores huyen. Y he aquí otro de los errores que está cometiendo DIA en toda esta locura en la que se ha convertido su actual realidad.
Esta semana, en Mercado Amigo: los trapos sucios se lavan en casa.
