- El agregado de posiciones cortas alcanza el 13,41% del capital
- La firma decepcionó con su beneficio y mantiene un endeudamiento que preocupa al mercado
Encontrar una empresa que soporta una presión bajista de más del 10% es difícil, y más aún si el valor no parece dar razones para ello. Este ha sido el caso de DIA, que durante meses ha aguantado el chaparrón, hasta que la semana pasada presentó unos resultados decepcionantes para el mercado.
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DIA publicó el martes un reporte con beneficios de 107 millones de euros entre enero y septiembre, que se mantiene prácticamente estable respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, el consenso de analistas anticipaba un crecimiento de al menos cinco millones de euros.
Las cifras del grupo de distribución desencadenaron una ola de ventas que se traduce en cuatro sesiones de caídas en las últimas cinco jornadas, en las que pierde más de un 11%. En el acumulado del año, la acción se deja ya más de un 10%, frente al retroceso del 8% para el Ibex 35. Hasta ahora había sido justo al revés. Pérdidas abultadas para el selectivo español y movimientos leves en el caso de DIA. Este lunes, sus acciones han caído un 1,3% hasta los 4,87 euros.
Así, los bajistas que han aguantado obtienen rédito. Y no son pocos. El agregado de posiciones cortas, según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), asciende al 13,41% del capital. Un volumen que es imposible encontrar en la bolsa española, y que se ha incrementado paulatinamente desde el 11,49% de junio.
El stock de deuda se situó en septiembre en 1.221 millones de euros, sin haber prácticamente variado respecto a diciembre
Un total de siete inversores institucionales tienen una apuesta que supera el 0,5% del capital, y que por lo tanto aparecen en estas estadísticas. El más agresivo es UBS Asset Management, con un 1,91% desde julio. Por su parte, un clásico de estos registros como es el fondo británico fundado por varios ex de Goldman Sachs AQR Capital, incrementó la presión en septiembre dos centésimas hasta el 1,41%.
La tercera mayor apuesta en corto es de AKO Capital con un 1,13% del capital. En este caso, el fondo finlandés la aumentó desde el 1% en agosto. Además, también figuran entre los bajistas el gigante BlackRock (0,9% del capital), GLG Partners (0,89%), Darsana (0,8%) y Dalton Strategic Partneship (0,62%).
REDUCCIÓN DE LA DEUDA
Una de las variables que preocupa a los inversores, o al menos a los no bajistas, respecto a DIA es la evolución de su apalancamiento. El stock de deuda se situó en septiembre en 1.221 millones de euros, sin haber prácticamente variado respecto a diciembre, según la presentación de resultados de esta semana. El grupo tiene el compromiso de reducir el endeudamiento en 200 millones este año, algo que todavía no ha hecho.
La agencia de rating Moody's ha asegurado en un informe que confía en que de cara al cierre del ejercicio la firma de distribución pueda reducir el apalancamiento, que ahora alcanza el ratio de dos veces el resultado bruto de explotación (Ebitda). Así, la calificadora de riesgos mostró optimismo acerca de la evolución de este dato, mientras que espera un crecimiento de las ventas comparables tanto en España como en Portugal.
¿CASTIGO PUNTUAL?
El castigo bursátil, que le ha costado a la compañía un 11% de su valor, podría ser algo puntual según algunos expertos. Por ejemplo los analistas de Bankinter, que recomiendan comprar por fundamentales con un precio objetivo de 6,5 euros, dando un potencial de revalorización del 33% respecto a los 4,9 euros actuales: “Apreciamos una tendencia de mejora en las ventas tanto brutas como comparables en relación a los trimestres precedentes. La recuperación en España y Portugal se consolida y los emergentes siguen mostrando un crecimiento importante”, señalan estos expertos en un informe.
No obstante, el análisis técnico se ha deteriorado. Así, “había un stop loss en los 5,20 euros dado que en ese nivel el precio superaba resistencias, con hueco, a principios de julio”, explica José María Rodríguez, analista técnico de Bolsamanía. “Por lo que no entendíamos que este hueco fuera cerrado (o lo que es lo mismo anulado) como de hecho ha ocurrido. Llegados a este punto estamos viendo al título intentar hacer soporte en el nivel de los 4,90 euros (ajuste del 50% de Fibonacci del último impulso alcista) y por debajo podría buscar la zona de los 4,65-4,70 euros (61,8% de retroceso)”. Como zona de resistencia, prosigue el experto, “ahora presenta una justo donde tenía el soporte, en los 5,20 euros. Todavía es pronto para poder añadir algo más, pues después superior al 10% desde este martes es normal que haya a un rebote. Es importante que el título respete la zona de soporte de los 4,90 euros – 4,60 euros en última instancia si no queremos empezar a ver fantasmas”, concluye.
