Endesa, Iberdrola y Naturgy han cerrado un acuerdo sobre prórroga de la licencia de la central nuclear de Almaraz. Tras varios meses de enfrentamiento sobre la renovación de la licencia de operación de la central, los propietarios de la nuclear han cerrado un acuerdo esta madrugada. El punto clave del acuerdo es un compromiso de inversión de 400 millones de euros, un monto que podría variar en una horquilla del 50% superior o inferior.
El acuerdo desencalla una negociación en la que ha tenido que intervenir la propia ministra Teresa Ribera, señala Vozpópuli, para evitar riesgos de cumplimiento del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PIEC) que establece que esta central opere hasta 2028.
El acuerdo se cerró en la madrugada de este viernes entre los responsables de generación de las empresas y tiene todavía que ser ratificado en la Asamblea de Propietarios, una cita que tiene lugar en la mañana de este viernes, consigna EFE. Las compañías tenían que pedir la prórroga de la operación de Almaraz antes del 31 de marzo. Una vez aprobado el acuerdo, se solicitará la renovación del permiso por un período de 7,4 años en el caso del grupo I de la central y de 8,2 años para el grupo II.
La solución del conflicto en Almaraz supone, además, garantizar el protocolo que las tres energéticas y EDP habían suscrito recientemente con Enresa para la continuidad del parque nuclear y su cierre ordenado entre 2025 y 2035, en línea con el PIEC. Las negociaciones entre las tres compañías quedaron atascadas después de que Endesa no aceptara la imposición de condiciones no recogidas en el protocolo firmado con Enresa por parte de Iberdrola y Naturgy.
La cláusula en conflicto marcaba un tope del 15% al aumento de la inversión recurrente de 400 millones. Endesa sostenía que no existía ninguna condición en el caso de que las inversiones necesarias fueran superiores a las previstas ya que era algo que quedaba en manos del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). El acuerdo alcanzado entre las tres 'grandes' eléctricas ha elevado ese tope sobre la cifra de inversiones previstas de 400 millones de euros al 50%.
El Gobierno remitió el pasado 22 de febrero a Bruselas su borrador de Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), en el que prevé que en 2030 todavía haya operativos en el 'mix' eléctrico español algo más de 3 gigavatios (GW) de nuclear y un cierre ordenado de estas plantas por orden cronológico.
El protocolo incluye un calendario de cierre para el parque nuclear español, contemplando las clausuras ordenadas y escalonadas de los actuales siete reactores desde 2027 (Almaraz) hasta 2035 (Trillo). De tal manera que, tras Almaraz, le tocaría el turno a Ascó I (2029) y Cofrentes (2030). En 2033, sería clausurado Ascó II y, en 2035, Vandellós y Trillo. A este ritmo, la vida útil de las centrales se situará en una media de unos 45-46 años.
