• Con este plan, la firma israelí pretende mejorar su situación financiera en los próximos dos ejercicios
  • Un periodo de consulta con los representantes legales de los trabajadores dará comienzo proximamente
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La empresa farmacéutica israelí Teva ha comunicado a su plantilla en España su intención aplicar un Expediente Regulatorio de Empleo (ERE) en sus instalaciones nacionales, como parte del plan de reestructuración global que se encuentra implementado, con una reducción del 25% de su plantilla, afectando a alrededor de 14.000 trabajadores en todo el mundo.

El anuncio se ha realizado a través del director de recursos humanos de la compañía en España, Víctor Soldevilla, quien explicaba que la decisión afectaría a grupos de trabajadores que integran las sociedades e Pharma y Ratiopharm. La medida viene determinada por "la dirección unitaria de ambas compañías, la unidad de medios e instalaciones de las mismas, la presión simultánea y sucesiva de servicios de empleados entre ambas compañías y la confusión de plantillas", apuntaba Soldevilla.

Asimismo, la firma reconoce que va a iniciar un periodo de consulta con los sindicatos y representación legal de los trabajadores, con una dirección no mayor de 30 días naturales.

Según datos de la propia web de Teva, su número de trabajadores en España asciende hasta los 998 trabajadores, con una planta propia en Zaragoza, especializada en sólidos orales.

PARTE DE SU PLAN GLOBAL DE REESTRUCTURACIÓN

La matriz de la filial de Telva en España ha anunciado su intención de recortar hasta en el 25% su número de empleados como parte de un plan bienal a escala mundial, que pretende mejorar la situación financiera de la firma y que afectará a un total de 14.000 trabajadores. Asimismo, se producirán cierres de varias plantas de fabricación, así como procederá al suspenso del dividendo de sus acciones.

Del mismo modo, se producirá una reducción de la inversión en Investigación y Desarrollo (I+D), con cierre de instalaciones dedicadas a ello, así como parte de sus oficinas centrales y oficinas en otras regiones.

Con todo ello, Teva pretende reducir sus costes alrededor de 3.000 millones de dólares (2.500 millones de euros al cambio) para final de los próximos dos ejercicios. A pesar de ello, la previsión de costes para el 2018 crece en 570 millones de euros, cifra que se reducirá durante los próximos años, por su naturaleza ligada a indemnizaciones y cargos adicionales por el cierre y desinversión en activos que la empresa deberá afrontar este año.

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