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Tras conocer los resultados del primer semestre, que publicó este miércoles, los expertos de Berenberg han recortado el precio objetivo de Vidrala hasta los 91 euros desde los 104 euros anteriores, aunque sigue recomendando 'comprar' ya que este precio aún supone otorgar a la compañía un fuerte potencial del 40%.
Según estos analistas, los resultados del segundo trimestre muestran los frutos de la política de precios especiales que estableció la empresa desde el 1 de abril, que ha servido en parte para recuperar los niveles "normales" de rentabilidad en el trimestre. Además, el grupo ha aprovechado para reforzar sus coberturas de gas para el resto de 2022.
"Dicho esto, dadas las enormes oscilaciones de los precios del mercado energético, la situación operativa sigue siendo intrínsecamente volátil", señalan estos expertos. A pesar de ello, siguen considerando que Vidrala está bien posicionada. "Ha invertido fuertemente en eficiencia durante los últimos cinco años, mientras que su exposición directa al suministro de gas ruso es limitada", precisan.
Vidrala anunció en la pasada sesión una reducción del beneficio del 30,8% en el primer semestre y una mejora del 23% en las ventas.
Berenberg subraya que en el primer semestre los márgenes de Vidrala se resintieron debido a las distorsiones en las estrategias de cobertura y precios del sector. "A medida que la ventaja de las coberturas de los competidores se reduce, esperamos que el mercado vuelva a centrarse en las cualidades inherentes de Vidrala, es decir, la competitividad en costes, la alta rentabilidad estructural y la flexibilidad (en términos de asignación de capital, fusiones y adquisiciones...)", precisa.
