BBVA no va a tomar, por el momento, medidas contra los cuatro directivos del banco que han sido llamados a declarar como investigados (actual referencia al antiguo imputado) por el caso del presunto espionaje de la entidad a empresarios, autoridades y periodistas a través de Grupo Cenyt, la empresa vinculada al excomisario de Policía José Manuel Villarejo. "La entidad actuará, en su caso, siempre en base a hechos contrastados y con la información suficiente", informan fuentes oficiales de BBVA.
Los cuatro actuales directivos llamados a declarar son Ignacio Pérez Caballero, director de Red de Banca Comercial en BBVA España; Javier Malagón Navas, responsable de la unidad de Performance Management & Control y exdirector de Finanzas de BBVA Bancomer (antigua marca de la filial del banco en México); Inés Díaz Ochagavía, directora de Seguridad Corporativa y sustituta de Julio Corrochano, también imputado, y Nazario Campo Campuzano, jefe de equipo de Seguridad de BBVA.
La entidad, por el momento, no quiere "prejuzgar" la posible responsabilidad de estos directivos ni de las dos personas también imputadas que siguen vinculadas al banco, que son Ricardo Gómez Barredo, actual miembro del consejo de administración de BBVA Garanti, la filial turca del grupo, y Antonio Béjar, presidente de Distrito Castellana Norte, la promotora participada por BBVA y San José encargada de ejecutar el proyecto de la Operación Chamartín.
Entre los imputados también se encuentra el ex consejero delegado de BBVA Ángel Cano, que fue el número dos de Francisco González entre 2009 y 2015.