- 0,000€
- 0,00%
Estaba claro que la entrada en vigor del nuevo límite mínimo de cotización iba a abrir la veda para la llegada en tromba de los 'ludópatas bursátiles' -esos especuladores extremos que afrontan un riesgo que los inversores de a pie no están dispuestos a afrontar. Esto se está viendo especialmente en Abengoa, donde la volatilidad vuelve a dispararse acrecentada por el hecho de que, al tener un nominal tan bajo, una inversión mínima en la compañía supone un terremoto para sus acciones.
Así pues, el caldo de cultivo en la empresa sevillana vuelve a ser el ideal para los especuladores, superado ese periodo de parón en el que estuvo estancada en los 0,01 euros. El problema está en que es más que probable que muchos de los que no saben jugar a este juego de la especulación entren en el mismo, lo que muy posiblemente llevará a más de uno a engrosar la larga lista de 'pillados' en Abengoa.
"Este tipo de inversores tiene un altísimo riesgo, están enfocadas a la especulación. Cualquiera que no tenga experiencia no debería tocar esto", recalca por enésima vez un experto a 'Bolsamanía', una advertencia que algunos prefieren obviar.
DOS SEMANA, DOS COMPORTAMIENTOS COMPLETAMENTE OPUESTOS
En la última semana y media, el comportamiento de Abengoa es un claro reflejo de lo que un inversor puede encontrarse si decide entrar en ella.
La semana pasada, con la publicación de sus resultados, los títulos de Abengoa B (los que tienen la mayor parte de los minoritarios) se desplomaron un 30%. Las cifras fueron malas, con abultadas pérdidas (213 millones hasta septiembre) y una deuda de más de 4.500 millones (4.698 millones de endeudamiento financiero bruto), por lo que el mercado optó por penalizar a la empresa teóricamente en base a estas cuentas.
Lo que está ocurriendo esta semana vuelve a poner en evidencia que no son los fundamentales los que dirigen la evolución de este tipo de compañías. Así, sin una justificación suficientemente potente más allá de un contrato conseguido en Chile, los títulos de Abengoa B acumulan en dos sesiones una fortísima subida del 100%, pasando a cotizar a 0,004 euros desde los 0,002 euros a los que cerró el pasado viernes.
Con todo, los analistas de 'Bolsamanía' recuerdan que los títulos de Abengoa B necesita subir un 300% para volver a valer un céntimo, lo que da idea de la situación en la que se encuentra la empresa. Sin embargo, mientras que la gran mayoría de accionistas es más que probable que nunca recuperen lo invertido, otros muchos parecen no temer las consecuencias y optan por arriesgar pese a todos las advertencias en sentido contrario.
"Las últimas subidas son anecdóticas porque el que ha entrado hace dos días pierde prácticamente todo", señala otro experto a 'Bolsamanía'. Sin embargo, este analista se muestra en cierto modo optimista respecto a la empresa en el sentido de que considera que está dando los pasos necesarios para asegurar su supervivencia, lo que es una buena noticia. "Lo importante es que asegure su supervivencia. Si dentro de dos años sigue existiendo, la cotización estará, seguro, muy por encima de los niveles actuales", augura este experto.