donald tusk theresa may
Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, y Theresa May, primera ministra de Reino UnidoConsejo Europeo

Bruselas y Londres siguen sin encontrar el acercamiento deseado sobre el Brexit. Mientras que en el bloque comunitario ven cada vez más conveniente el retraso de la fecha inicial prevista para que Reino Unido abandone la Unión Europea, la 'premier' Theresa May insiste en la salida el 29 de marzo y sigue buscando un cambio en el acuerdo de retirada para lograr el visto bueno del Parlamento británico.

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha seguido la misma línea que el negociador jefe de la UE para el Brexit, Michel Barnier, y ha dicho que retrasar la fecha es la mejor opción. "Sería una solución racional", ha dicho el mantaratio, ya que aún no hay una mayoría en el Parlamento británico que permita aprobar el acuerdo de divorcio y las negociaciones entre Bruselas y el Gobierno de May siguen sin avanzar.

"Creo que en la situación en la que nos encontramos, una prórroga sería una decisión racional, pero la primera ministra May aún cree que podrá evitar este escenario", ha dicho Tusk en una conferencia de prensa en Egipto, según recoge Reuters, un día después de ver a la líder británica. Según ha explicado el presidente del Consejo, habló con May sobre el "contexto legal y político de una posible extensión" de la fecha límite de dos años, que expira en un mes, el próximo 29 de marzo.

Según Tusk, está "absolutamente claro que no hay una mayoría en la Cámara de los Comunes para aprobar el acuerdo", por lo que ahora hay que elegir entre "un Brexit caótico o una extensión del plazo", ha insistido. De hecho, ha señalado que "cuanto menos tiempo quede hasta el 29 de marzo, mayor será la probabilidad de una prórroga. Y esto es un hecho, no nuestro plan o nuestro objetivo".

MAY SIGUE SIN CEDER

Aunque la primera ministra sigue sin ceder y sin contemplar esa posibilidad que Bruselas lleva semanas poniendo encima de la mesa. En opinión de May, retrasar el Brexit no resolverá el estancamiento del acuerdo, y solo supondrá retrasar la decisión final que debe tomar el Parlamento, que es si acepta o no el acuerdo alcanzado con el bloque comunitario o si, por el contrario, opta por una salida desordenada de la UE.

"Una extensión del Artículo 50, un retraso en este proceso, no da una decisión en el Parlamento y no entrega un acuerdo", ha dicho la 'premier', que ha destacado que lo que hace es "precisamente lo que dice la palabra", ya que "solo retrasa el momento en que se llega a esa decisión. Y creo que cualquier extensión del Artículo 50, en ese sentido, no está abordando el tema. Lo tenemos a nuestro alcance", ha remarcado May según informa Reuters.

En su opinión, "cualquier retraso es un retraso, no aborda el problema, no lo resuelve", y por eso el Gobierno británico no contempla esta opción, pese a que es uno de los temas que está tratando con la UE en sus últimas negociaciones. "Lo que he sentido en todas mis conversaciones es una verdadera determinación de encontrar una salida que permita al Reino Unido abandonar la UE de una manera ordenada y sin problemas con un acuerdo", ha destacado en Egipto.

Noticias relacionadas

contador