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Luigi di Maio y Matteo Salvini durante un acto oficial

El líder del Movimiento 5 Estrellas, Luigi di Maio, y el de La Liga, Matteo Salvini, han emitido un comunicado conjunto en el que informan de un acuerdo para sacar adelante los Presupuestos de 2019, por el que fijan el objetivo del déficit en el 2,4%. El anterior Gobierno había establecido un objetivo del 0,9% para el próximo año.

De igual forma, el acuerdo anunciado por los vicepresidentes del Gobierno contempla una reducción de impuestos hasta un tipo único del 15% para las empresas y una rebaja de la edad de jubilación para que 400.000 italianos puedan retirarse, así como suprimir la subida del IVA prevista para enero, según ha concretado Salvini.

También se incluye un compromiso de gasto de 10.000 millones de euros para elevar las pensiones mínimas y para las denominadas pensiones de ciudadanía, que beneficiarán a 6,5 millones de italianos. Y también se contempla un gasto de 1.000 millones de euros para compensar a los ciudadanos afectados por fraudes bancarios.

El acuerdo final de déficit supera el compromiso del primer ministro, Giuseppe Conte, que aspiraba a que se mantuviese por debajo del "umbral psicológico" del 2% para cumplir con las exigencias de Bruselas, que comprometen a Italia a consolidar su déficit presupuestario en 0,6 puntos del PIB.

Sin embargo, las presiones los miembros de la coalición, La Liga y el Movimiento Cinco Estrellas por incrementar el gasto público para cumplir sus promesas electorales han prosperado. El acuerdo supone todo un desafío a la Unión Europea.

El mercado esperaba con muchas dudas el acuerdo entre La Liga y el Movimiento 5 Estrellas, incluso especulando con que la aprobación de los Presupuestos finalmente pudiera retrasarse. Los expertos de Link Securities ya advertían de que, si la meta de déficit superaba el 2%, esperaban "una reacción negativa de los mercados financieros italianos, reacción que podría contagiar al resto de mercados periféricos, lastrando incluso el comportamiento del euro".

A estas horas, la rentabilidad del bono italiano a 10 años escala hasta el 2,893%, mientras el euro se deprecia un 0,87% frente al dólar, hasta $1,1640.

A LA ESPERA DE EUROPA

El acuerdo presupuestario tendrá que ser sometido ahora al escrutinio de Bruselas, que ya había advertido que con un déficit superior al 2% podría rechazarse. Italia deberá entregar el borrador de los Presupuestos a las instituciones europeas el 15 de octubre, una vez que se haya presentado en el Parlamento italiano. Ya en noviembre, Bruselas entregará sus recomendaciones.

Desde Blackrock, aunque se muestran optimistas con que el presupuesto sea lo "suficientemente moderado" como para ser aprobado por la Unión Europea (UE), sí que reconocen que la elevada deuda, unida a la menor previsión de crecimiento del país pueden hacer que Italia sea más "vulnerable" a una posible ralentización del crecimiento mundial. Según las previsiones, el PIB italiano crecerá un 1,5% en 2018, un 1,4% en 2019 y un 1,3% en 2020.

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