- El-Erian asegura que Grecia deberá implementar una moneda paralela al euro
El "corralito" que se ha impuesto en Grecia, con todos los bancos del país cerrados hasta el 6 de julio, día después de que el país vote el referendum para aceptar o rechazar las medidas impuestas por los acreedores del país para liberar el tramo pendiente del rescate financiero. Es lo que el ex directivo de Investment Management Co, Mohamed El-Erian, llama un “parón repentino”, cuando “se para el sistema de pagos de un país”. Las consecuencias, apunta este experto, son una contracción económica masiva que llevarán a Grecia a dejar la zona euro.
El-Erian analiza la actual situación financiera en Grecia para Bloomberg y avisa que hay un “85% de posibilidades de que Grecia se vea forzada a dejar de ser socia del euro”. “Ante una suspensión de pagos -como la que ha decretado Tsipras-, la consecuencia es una masiva contracción económica, rebelión contra el gobierno y, por ende, se hará muy difícil para Grecia continuar como miembro de la zona euro”.
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Para quien acuñó el término “Grexit” en 2012, el resultado en Grecia es un “accidente que se ha ido gestando durante numerosos años”. “Refleja la incapacidad de entender el punto de vista del otro y la incapacidad de alcanzar un compromiso. Europa debería haber hecho posible una reducción de la deuda griega y Grecia debería haber trabajado en la implementación de reformas”, asegura el experto.
El resultado en Grecia es un “accidente que se ha ido gestando durante numerosos años
El también colaborador de Bloomberg cree que ahora el Banco Central Europeo es un jugador clave en la contención de la quiebra al resto de países de la moneda compartida, ya que la reciente crisis amenaza con deshacer gran parte del trabajo que el presidente de la entidad, Mario Draghi ha llevado a cabo para restaurar la confianza en el euro como divisa líder de la operativa global.
El-Erian también advierte de que los riesgos son múltiples y, si bien desde el punto de vista económico, Grecia apenas representa el 2% del PIB de la región, su salida pondrá al bloque de la zona euro en un territorio desconocido y sentará un precedente para otros países que también puedan reconsiderar su pertenencia a la zona euro.
¿NUEVO DRACMA?
Ante esta marcha de Grecia, que El-Erian da por hecha, cree el experto que algún tipo de moneda paralela se implementará en el país ya que el Gobierno tiene que encontrar la manera de pagar sus facturas.
El martes, 30 de junio, marca la fecha límite para que el país satisfaga su pago al Fondo Monetario Internacional y para que se pueda extender la ayuda a la región en forma del tramo pendiente del rescate de los acreedores. El experto sí reconoce que, aunque no hay ninguna regla que diga que Grecia debe abandonar el euro si no paga o si no tiene ayuda económica, será muy difícil para el país permanecer en la unión monetaria. Así, insiste El-Erian, tendrá que empezar a imprimir moneda propia.
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