En las últimas sesiones hemos visto rebotar al oro, que como sabemos por definición acostumbra a comportarse mejor cuando las bolsas caen con fuerza. Como buen activo refugio que es ante periodos turbulentos.
Las alzas de los últimos días encajan a la perfección dentro del típico ‘pull back’ a la resistencia, antes soporte, de los 1.302-1.303 dólares. En cualquier caso, seguimos creyendo que existe la posibilidad de que el ‘metal precioso’ ataque la zona de soporte que presenta en los 1.265 dólares. Y ahí es donde intentaremos subirnos al tren de las compras por el lado largo o alcista, con la condición de que en velas semanales no cierre bajo ningún concepto por debajo de esta directriz alista. Y como objetivo tenemos los máximos anuales en los 1.365 dólares.
