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Como se puede observar en el gráfico diario de nuestra petrolera, el precio se está desplazando con precisión máxima dentro de un canal bajista desde hace exactamente un año.
En las últimas sesiones hemos asistido a una corrección de cierta intensidad en los títulos de Repsol, aunque siendo objetivos nada que no hayamos visto para el conjunto del mercado. Dicho esto, lo más interesante es que el precio se ha girado a la baja con máxima precisión desde la parte superior del impecable canal bajista por el que se viene desplazando el título desde hace un año. O lo que es lo mismo, para poder decir que por fin algo está empezando a cambiar en los títulos de nuestra petrolera le vamos a pedir que salte, con holgura y en precios de cierre, por encima de la resistencia que presenta en el último máximo decreciente: los 14,45 euros. Vaya por delante que, el canal lateral-bajista del último año se corresponde con la fase de ajuste (o fase de reacción) de las fortísimas subidas previas, las que llevaron al título desde los 6,50 (enero de 2016) hasta los 16,40 euros (julio de 2018).
