El euro se mantiene sobre los 1,07 dólares (1,0725) a la espera de que el Banco Central Europeo (BCE) se pronuncie este jueves. La mayoría del mercado espera que haya una pausa en las subidas de tipos, pero también que Christine Lagarde, presidenta del BCE, insista en que éstos permanecerán altos tanto tiempo como sea necesario, al tiempo que se deja abierta la puerta a otro alza antes de que acabe el año.
"Ni una subida ni una pausa supondrían una gran sorpresa para los mercados", afirma en una nota de análisis Piet Haines Christiansen, observador del BCE en Danske Bank Research. Los mercados estiman en un 39% la probabilidad de una subida de los tipos de interés de 25 puntos básicos y en un 61% la probabilidad de que el BCE mantenga sin cambios sus tipos de interés oficiales, según los datos de Refinitiv.
Jefferies espera que el Banco Central Europeo mantenga los tipos de interés este jueves, pero dejando la puerta abierta a otra subida en las próximas reuniones, afirma el economista jefe europeo, Mohit Kumar, en una nota de análisis. "Esperamos una pausa de halcón por parte del BCE esta semana", señala Kumar, añadiendo que los recientes datos débiles de Europa deberían ser motivo para que el BCE se mantenga a la expectativa. "No hay urgencia para subir los tipos y el BCE podría esperar a tener más datos para decidir sobre futuras medidas políticas", indica el economista.
Para UBS Global Wealth Management, el euro no debería bajar a partir de ahora, pero esto requiere "un mensaje claro del Banco Central Europeo de que la lucha contra la inflación sigue siendo la principal prioridad". UBS GWM no ve signos de tensión financiera que impidan al BCE endurecer aún más su política monetaria. "Una subida en septiembre u octubre apoyaría al euro".
Diego Morín, analista de IG, explica que la falta de claridad de Lagarde sobre lo que ocurrirá este jueves ha pasado factura al euro, y prevé un alza de 25 puntos básicos esta semana, sin descartar la posibilidad de otro incremento adicional antes de finales de año.
La situación del euro "no tiene mucha pinta de cambiar en el corto plazo", indica Morín. "La fortaleza del dólar en las últimas semanas, sumado a la poca contundencia de Lagarde en sus comentarios, provocó la pérdida en agosto del nivel psicológico más importante para mí, los 1,10 dólares, una zona donde siempre ha existido mucha disputa entre oferta y demanda desde el derrumbe en el año 2014", añade.
"Por tanto, no podemos descartar que retroceda al nivel de soporte de corto plazo como serían los 1,0630 dólares, aunque la pérdida de dicho punto podría llevarnos hasta los 1,05 dólares, mínimos del pasado mes de febrero", explica Morín.
Francesco Pesole, analista de ING FX, opina por su parte que el euro podría bajar frente al dólar antes de la decisión de tipos del BCE de este jueves, ya que los operadores deshacen sus posiciones especulativas en euros. Se espera que el dólar se mueva al alza antes de la publicación de los datos del IPC de EEUU este miércoles, haciendo que el euro caiga en comparación, señala ING.
