El Banco Central Europeo (BCE) compró 1.704 millones de euros (2.200 millones de dólares) en cédulas hipotecarias la semana pasada, en un nuevo esfuerzo para reactivar la economía de la zona euro.
La autoridad monetaria del Viejo Continente comenzó las adquisiciones el 20 de octubre y volvió al mercado por tercera vez en seis años con el objetivo de evitar la deflación e insuflar vida a una recuperación moribunda, destaca Bloomberg.
El mercado ha vigilado con atención los movimientos del BCE en su primera semana de compras de activo para medir la rapidez con la que el presidente, Mario Draghi, tiene previsto cumplir con su promesa de expandir el balance de la institución hasta en un billón.
“Esta operación es más grande de lo que esperábamos (…) Estas cifras nos dicen que el BCE está siendo agresivo en cuanto a la expansión de su balance”, destaca Agustín Martín, de BBVA en Londres.
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