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El Banco de Inglaterra (BoE) ha sido claro sobre el futuro económico de Reino Unido. "Las proyecciones de actividad e inflación describen una perspectiva muy desafiante", ha señalado el organismo en su comunicado sobre política monetaria. En su reunión de este jueves tomaba la decisión de subir los tipos de interés un 0,75%, hasta el 3%, su mayor alza en 33 años.

El anuncio no ha sido bien recibido por la libra esterlina, que caía hasta los 1,1165 dólares, su nivel más bajo desde el 21 de octubre, nada más conocerse la noticia. Poco después, se ha recuperado levemente, hasta los 1,1192 dólares, pero la divisa británica ha seguido cotizando en negativo (-1,75%).

Sin embargo, los expertos creen que la libra se encuentra sobre una base más firme desde el nombramiento del nuevo primer ministro Rishi Sunak, pero Wall Street aún ve una mayor vulnerabilidad en los próximos 12 meses.

"La libra ha perdido más impulso a raíz de la decisión del BoE", señala Naeem Aslam, analista jefe de mercado de Avatrade. Este experto cree que, aunque las monedas generalmente suben cuando un banco central aumenta las tasas, "en el Reino Unido, se trata principalmente del miedo a la recesión y del hecho de que el BoE prevé que la recesión se prolongue durante dos años; significa que se avecinan tiempos difíciles, y vamos a ver cómo la economía, los mercados y la moneda se derrumban en los próximos meses".

El aviso realizado por el BoE de que se avecina una recesión histórica ha puesto a los mercados a la defensiva. “La libra ha tenido un gran desempeño inferior en el espacio de FX este jueves, con temores sobre un período de recesión prolongado que conduce a la libra esterlina a la baja, en beneficio del FTSE100. Si bien el FTSE100 actualmente está protegido por el impacto positivo que tiene una libra más débil en las ganancias de la compañía, es poco probable que ese impulso dure, ya que los operadores sopesan la recesión más larga desde que comenzó el registro", indica Joshua Mahony, analista senior de mercado de la plataforma de comercio en línea IG .

No obstante, Mahoy afirma que "si bien los bancos han demostrado ser los principales beneficiarios cuando aumentan las tasas, las perspectivas económicas parecen lejos de ser favorables en medio de una posible recesión hasta mediados de 2024", y resalta que el hecho más preocupante es que el pronóstico del banco central no es de ninguna manera el peor de los casos, "con una clara posibilidad de que los precios de la energía se disparen una vez más para prolongar el endurecimiento monetario y prolongar la recesión. Desafortunadamente, las tasas de interés pueden parecer una herramienta relativamente contundente cuando se trata de combatir la inflación altísima impulsada por factores geopolíticos y la falta de inversión".

En los últimos meses, la inestabilidad política a la que se ha visto sometida Reino Unido ha tenido un efecto negativo en la divisa del país. Tocó un mínimo histórico frente al dólar en septiembre, cuando se situó por debajo de 1,10 dólares, y los analistas siguen advirtiendo sobre su vulnerabilidad.

"Esta no es la primera vez que la libra ha caído en reacción a un alza de tasas del BoE este año", indica Jane Foley, jefa de estrategia de Rabobank. "En mayo, la libra se movió a la baja después de un alza de tasas esperada de 25 pb y en agosto la libra cayó después de que el Banco subiera las tasas, pero simultáneamente advirtió de una recesión de cinco trimestres a partir del cuarto trimestre de 2022".

En este sentido, el BoE ha anunciado que "es posible que se requieran aumentos adicionales" en los intereses para lograr el objetivo de devolver la inflación al 2%. Con respecto a las previsiones económicas, el banco central ha anticipado que el PIB puede caer un 0,75% durante el segundo semestre de 2022 y que la inflación repunte hasta el 11% en el cuarto trimestre del año.

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