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Japanese templesFlickr (PD)

Las principales bolsas del continente asiático han dejado subidas esta madrugada, animadas por la caída de los precios del petróleo durante la pasada noche, sin embargo, el desplome del yen ha desatado la alarma entre los inversores, que se muestran críticos con las compras extraordinarias de bonos del Banco de Japón.

La divisa nipona se mantiene en el punto de mira de los inversores este martes, después de caer a mínimos de siete años el lunes, por encima de 125,00 yenes contra el dólar, arrastrado por la política ultra acomodaticia del Banco de Japón (BoJ por sus siglas en inglés), que contrasta con el endurecimiento o la normalización que están iniciando el resto de supervisores monetarios del mundo. El banco central nipón, además, anunció este lunes una operación de compra ilimitada de bonos a 10 años al 0,25% durante los cuatro primeros días de esta semana.

El Nikkei 225 de Japón cerró un 1,10% más alto, en 28.252,42, mientras que el Topix subió un 0,93%, en 1.991,66. Los valores tecnológicos subieron, con Sony subiendo un 1,81% y SoftBank Group un 1,89%.

El índice Hang Seng de Hong Kong subió un 0,91% en la última hora de negociación, gracias a la subida de los valores de casinos y tecnología. Entre las mayores ganancias se encuentra JD Health, que se disparó más de un 16%, después de que dijera el lunes que llevaría a cabo una recompra de acciones de hasta 3.000 millones de dólares de Hong Kong en un periodo de 24 meses.

Las acciones inmobiliarias, sin embargo, fueron en contra de la tendencia general, ya que Sunac se desplomó alrededor del 18% y Shimao perdió más del 9%. El índice inmobiliario CSI de China perdió hasta un 2% anteriormente, pero recortó algunas pérdidas para bajar un 1,4%.

Las bolsas de China continental se deshicieron de las ganancias, ya que el índice compuesto de Shanghai bajó un 0,33% para cerrar en 3.203,94, mientras que el componente de Shenzhen cayó un 0,46% hasta 11.895,08.

El S&P/ASX 200 australiano subió un 0,7%, hasta los 7.464,30, gracias a la subida de los valores bancarios. Sin embargo, algunos valores mineros y petrolíferos bajaron, contradiciendo la tendencia. El Kospi surcoreano subió un 0,42% y cerró en 2.741,07.

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