- Los tres principales índices de Wall Street se mueven al son de las políticas de Trump
- Sin embargo, por ahora, el Nasdaq es el que menos se está viendo afectado
El triunfo del actual presidente de EEUU, Donald Trump, el pasado 8 de noviembre fue el pistoletazo de salida a un rally de máximos históricos en Wall Street. Promesas de mejores condiciones fiscales e incentivos para las empresas estadounidenses han hecho que los tres principales índices hayan estado en subida libre.
El Dow Jones ya llegó a los 20.000 puntos e incluso se atrevió a atravesar esa barrera y cerró por encima de los 21.000 puntos. El S&P 500 ha alcanzado una capitalización conjunta de 20 billones de dólares. Sólo queda el Nasdaq Composite. El índice está cerca de conseguir los 6.000 puntos, un máximo histórico y un nivel psicológico.
Hay que destacar que el Nasdaq se ha revalorizado un 12% desde el triunfo de Trump y en este año, la subida es, hasta la fecha, del 7,6%
El 21 de marzo, el Nasdaq se quedó a las puertas de tocar esa barrera. El índice conquistó un máximo histórico intradía en los 5.928,06 puntos, a tan solo 1,2% de los 6.000. Sin embargo, esa sesión fue la peor de 2017 para Wall Street, ya que terminó cerrando con caídas superiores al 1% y en el caso del Nasdaq cercanas al 2%.
Desde esa jornada, la Bolsa de Nueva York parece que no ha levantado el vuelo y se sitúa lejos de sus máximos históricos. A pesar de ello, hay que destacar que el Nasdaq se ha revalorizado un 12% desde el triunfo de Trump y en este año, la subida es, hasta la fecha, del 7,6%.
¿FIN DEL CICLO ALCISTA?
Los tres principales índices de Wall Street celebraron ocho años de subidas. Sin embargo, las últimas sesiones están siendo negativas para ellos. “La llegada de Trump ha sido la panacea para la bolsa de EEUU, por eso nosotros decimos que hay que ser cautos”, señala Celso Otero, analista de Renta 4. No obstante, alerta sobre las decisiones del presidente, que no están saliendo como él prometía.
“Puede que los índices sigan en máximos, lo que pasa es que ahora estamos comprando una cosa más cara, no es un mercado normalizado”, apunta Otero, para el que la revalorización del dólar puede ser un problema para las compañías y, por tanto, para su recorrido en bolsa.
Felipe López-Gálvez, analista de Selfbank, explica que aunque la Fed está subiendo tipos de manera muy progresiva llegará un momento en el que los inversores se plantearán “si les compensa seguir estando en renta variable cuando la renta fija empieza a ofrecer rentabilidades atractivas con menor riesgo”.
Además, apunta que la bolsa americana está cotizando a unas ratios más exigentes que la europea, es decir, “cuenta con un PER más elevado, que está por encima de su media histórica”. Por esto, según López-Gálvez, si el panorama político se despeja en Europa y las perspectivas para el euro mejoran, “puede haber un movimiento considerable de dinero desde Wall Street al Viejo Continente”.
LOS MEJORES SECTORES
El Nasdaq Composite está compuesto por más de 5.000 empresas y está dividido en ocho índices de sectores: banca, informática, finanzas, empresas industriales, seguros, telecomunicaciones y transportes. En este índice cotizan las empresas tecnológicas más importantes del mundo como Apple, Alphabet (matriz de Google) o Microsoft.
Estos valores son muy importantes en el índice ya que tienen una elevada ponderación. Algo que salió a luz con el estallido de la burbuja puntocom en el año 2000. “Este índice no está como en esos años, cuando se apostaba por empresas que no ganaban dinero. Ahora hay compañías muy fuertes por fundamentales”, comenta Otero.
Para el analista de SelfBank, los sectores más fuertes en el Nasdaq son el biotecnológico y el de la tecnología, así como los valores del e-commerce. “En un contexto demográfico con un evidente envejecimiento de la población, todo lo relacionado con la salud tendrá una fuerte demanda”, apunta López-Gálvez.
Por otro lado, el experto de SelfBank señala que las empresas tecnológicas están apostando por el i+D en campos tan diversos como los servicios financieros y la movilidad, “por lo que ya son una de las mayores amenazas para la banca tradicional y los grandes fabricantes de coches, entre otros”.
Los sectores más fuertes en el Nasdaq son el biotecnológico y el de la tecnología, así como los valores del e-commerce
De esta manera, añade que “en cualquier cartera de acciones diversificada debería estar presente un sector, el de la tecnología, que está llamado a ocupar cada vez más peso en la economía”.
A LA ESPERA DE LA REFORMA FISCAL
Hay más cosas que pueden frenar al Nasdaq Composite en su camino hacia los 6.000 puntos. Como las políticas de Trump. Si ya fue un revés para Wall Street que no se votase la reforma sanitaria, es decir, derogar la conocida ‘Obamacare’, una reforma fiscal menos atractiva para las empresas puede perjudicar al índice.
La reforma tributaria es lo que realmente importa al mercado. El presidente ha prometido ventajas impositivas para las empresas estadounidenses que tengan su actividad en el país. Donald Trump va a poner todo su esfuerzo en esta reforma, aunque no le va a resultar complicado.
López-Gálvez explica que grandes corporaciones de Nasdaq como Apple, Alphabet o Amazon están esperando a conocer estos planes fiscales “porque podrían abaratar el pago de impuestos a la hora de repatriar los beneficios generados fuera de EEUU”. Sin embargo, si no se llega a lo esperado, los inversores recogerán beneficios en el índice.
