Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), no cierra la puerta a más subidas de los tipos de interés en la zona euro pese a la reciente crisis bancaria, debido a que la elevada inflación que se ha instalado en la economía europea. Así lo ha vuelto a confirmar la banquera central en una intervención realizada este miércoles en una conferencia celebrada en Frankfurt.
"La dinámica de la inflación subyacente sigue siendo fuerte. Frente a shocks nuevos y superpuestos, hoy no tenemos más remedio que lidiar con la incertidumbre", ha explicado Lagarde.
"Con una incertidumbre alta, es aún más importante que la trayectoria de los tipos dependa de los datos. Esto significa, ex ante, que ni estamos comprometidos a subir más ni hemos terminado con las subidas de tipos", ha añadido
"De hecho, como expliqué la semana pasada, si se confirma el escenario base de nuestras proyecciones más recientes, todavía tendremos terreno que recorrer para asegurarnos de que se eliminen las presiones inflacionarias", ha comentado, en referencia a la última reunión monetaria celebrada por el BCE, en la que el organismo aumentó los tipos de interés 50 puntos básicos.
INFLACIÓN Y ESTABILIDAD FINANCIERA
Lagarde ha querido dejar claro que el BCE puede seguir luchando contra la inflación y subiendo tipos mientras preserva la estabilidad financiera de la eurozona.
"Si bien el sector bancario europeo es resistente, con fuertes posiciones de capital y liquidez, en vista de la reciente volatilidad de los mercados financieros, estamos listos para actuar y brindar apoyo de liquidez al sistema financiero si es necesario y para preservar la transmisión fluida de la política monetaria", ha precisado.
En este sentido, ha añadido que "debe quedar claro que no existe una compensación entre la estabilidad de precios y la estabilidad financiera. Como hemos demostrado muchas veces, podemos establecer la postura de política monetaria adecuada para controlar la inflación y, al mismo tiempo, utilizar otros instrumentos para abordar los riesgos para la transmisión de la política monetaria".
"Tenemos muchas herramientas para brindar apoyo de liquidez al sistema financiero si es necesario y para preservar la transmisión fluida de la política monetaria", ha valorado Lagarde.
Así, ha querido subrayar su firme compromiso para controlar la inflación. "Debemos, y lo haremos, reducir la inflación a nuestro objetivo a medio plazo de manera oportuna", ha reiterado.
ATENCIÓN A LAS CONDICIONES FINANCIERAS
Esto no quiere decir que el BCE no vigile de cerca las turbulencias financieras que han surgido en las últimas semanas. "Para lograr este objetivo necesitamos una estrategia sólida, que tenga en cuenta los altos niveles de incertidumbre a los que nos enfrentamos", ha destacado Lagarde.
"Con ese fin", ha relatado, "la trayectoria de nuestra política futura estará determinada por tres factores: nuestra evaluación de las perspectivas de inflación a la luz de los datos económicos y financieros entrantes, la dinámica de la inflación subyacente y la fortaleza de la transmisión de la política monetaria".
Sobre este último punto, el BCE vigilará "cuidadosamente en las próximas semanas y meses si hay un mayor fortalecimiento de este traspaso. Si, por ejemplo, los bancos comienzan a aplicar una 'cuña de intermediación' más grande, lo que significa que en cualquier nivel de la tasa base exigen una mayor compensación por el riesgo percibido que están asumiendo al prestar, entonces el traspaso será más fuerte".
"Por lo tanto", ha relatado, "prestaremos mucha atención a una serie de indicadores de disponibilidad de crédito y precios de crédito, como los datos mensuales sobre flujos de dinero y crédito, nuestra encuesta de préstamos bancarios y nuestra encuesta sobre el acceso a la financiación para pequeñas y medianas empresas".
"Si bien las condiciones crediticias más restrictivas son parte del mecanismo por el cual nuestro endurecimiento en última instancia frena las presiones excesivas sobre los precios y lleva la inflación de regreso a la meta, nos aseguraremos de que el proceso sea ordenado en todo momento", ha concluido la presidenta del BCE.
