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Bolsa de Madrid.ÓSCAR DEL POZO/EUROPA PRESS - Archivo
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O mucho cambian las cosas en agosto o el verano servirá para confirmar que el Ibex es el 'hermano pobre' de Europa, el único de todos los índices del Viejo Continente incapaz de rebotar desde los mínimos de junio. De hecho, tiene ese nivel -los 8.900 puntos - a un suspiro y todo apunta a que se va de cabeza a por él a poco que los bancos empeoren un poco más.

Y es que, sin catalizadores positivos en el horizonte, hay dos factores negativos que claramente están penalizado al selectivo español este verano: el mal comportamiento de los bancos, recurrente desde que arrancó el año, y el inesperado varapalo a las eléctricas por las novedades regulatorias que está impulsando la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y que tanto daño les están haciendo en bolsa.

Desde que los índices del Viejo Continente marcaran mínimos en junio y empezaran a rebotar, el Ibex está prácticamente plano, con subidas mínimas, mientras que el Dax suma un 5% arriba; el EuroStoxx, un 8%; el Cac, cerca de un 9%; y el Ftse MIB, alrededor de un 10%. En Estados Unidos, S&P y Dow avanzan un 10%, respectivamente, mientras que el Nasdaq se desmarca con un 15% arriba.

Los niveles a vigilar del Ibex siguen siendo los mismos que hace semanas: los 8.900 por abajo y los 9.410 puntos por arriba. Más allá de eso, los analistas no tienen nada claro hacia dónde va a ir el selectivo. Eso sí, recalcan la importancia de ese nivel de los 8.900 puntos. "Si lo pierde se va a la casilla de salida, a los 8.300 puntos de principios de año", advierte Eduardo Bolinches, analista independiente y colaborador de ActrivTraders.

Bolinches reconoce que "el Ibex son los bancos" y avisa de que "la sangre aún no se ha visto en los bancos medianos". "Yo no voy a ser comprador de esos bancos, Sabadell, CaixaBank, Bankia... Aún no se ha visto el pánico, y ojo con Sabadell, porque se puede poner en 0,6 euros", avisa este analista. Banco Sabadell volvió a caer con fuerza este martes tras un informe negativo de Berenberg en el que se apunta que lo tiene muy complicado para cumplir objetivos por mucho que los haya rebajado. El banco no para de marcar nuevos mínimos históricos un día tras otro.

El Ibex arrancó el año en 8.300 puntos y marcó máximos en enero en 9.600 puntos. Desde entonces, el selectivo español se ha mantenido en un rango lateral, aunque moviéndose en la parte alta de éste. "El rango tiene que salir por algún sitio y ahora el Ibex está amagando por romper por abajo. Habrá que ver, pero las cosas pintan mal", avisa este experto.

DEBERÍA SEGUIR LA TENDENCIA...

Nicolás López, director de análisis de M&G Valores, también reconoce que el Ibex depende de los bancos y que el sector bancario y las eléctricas le están haciendo mucho daño este verano. Sin embargo, al mismo tiempo considera que la tendencia del selectivo no debería ser diferente a la tendencia del resto del mundo. "Yo no creo que vayamos a entrar en una dinámica bajista. El mercado en su conjunto parece confiado en que la economía no va a fallar y, aunque podríamos llevarnos un susto, mi impresión es que esto no ocurrirá", explica este analista.

El Ibex ahora mismo está "atascado" y con la fuerte caída de ayer se ha ido hacia la parte baja del rango lateral. "Espero que se estabilice entre los 8.900 y los 9.400. Todavía no veo un cambio a negativo", recalca López.

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