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Los servicios de emergencia de Nueva Zelanda recibieron un aviso este viernes de una persona que había presenciado un accidente de avión cerca de la costa de la Isla Sur de Nueva Zelanda, según informó el portavoz de la policía a The Wall Street Journal.
Las autoridades se dispusieron a actuar rápido e incluso enviaron un helicóptero de rescate al lugar de los hechos. Pero en lugar de encontrarse un accidente de avión, encontraron uno de los globos de observación que utiliza Google y que tienen un gran tamaño.
El gigante tecnológico ha estado realizando pruebas con estos globos que pueden volar incluso dos veces más alto que los aviones comerciales desde el año pasado. De hecho, Google confirmó el aterrizaje de su aparato y comentó que es difícil mantenerlos en un solo lugar debido a los fuertes vientos, razón por la que se estaban realizando las pruebas.
“Desde el lanzamiento del proyecto Loon en Nueva Zelanda el año pasado, hemos realizado vuelos de investigación para mejorar la tecnología”, declaró un portavoz de Google, que añadió que estaban coordinados con un equipo de control de tráfico aéreo dedicado a la recuperación de los globos cuando aterrizan.
Google espera que los globos ayuden a proporcionar servicios de banda ancha en lugares remotos del mundo. Pese a los avances constantes en el acceso a Internet, la compañía calcula que por cada persona que pueda estar en línea hay dos que no lo están.
JA.M.