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La multinacional estadounidense Walmart se ha pronunciado tras los tiroteos en El Paso y Ohio. El lunes la compañía aseguró que no se ha producido ningún cambio en su política de venta de armas después de los tiroteos del fin de semana que provocaron 31 muertes. Cabe recordar que uno de ellos tuvo lugar en uno de los establecimientos de la propia cadena.

Concretamente, el tiroteo que se produjo en una de las tiendas de Walmart tuvo lugar en la ciudad fronteriza de El Paso y el número de víctimas fue de 22. El tiroteo desató todo tipo de reacciones en las redes sociales y muchos internautas se posicionaron en contra de la compañía, la mayor vendedora de armas del país, con los hashtags #walmartshooting, #boycottwalmart y #guncontrollnow.

Esta no es la primera ocasión en la que Walmart se encuentra en el punto de mira nacional e internacional por su venta de armas. Y es que la presión ejercida llevó a la multinacional americana a dejar de vender rifles de asalto en 2015 y elevar la edad mínima para adquirir pistolas a 21 años el pasado año. Pero ahora algunos activistas de control de armas, e incluso clientes de Walmart, exigen que la empresa que cotiza en la Bolsa de Nueva York desde 1972 deje de vender armas de manera inmediata.

Concretamente, reclaman a la compañía que deje de vender armas de fuego y tampoco contribuyan a financiar las campañas de los congresistas que defienden los postulados de la Asociación Nacional del Rifle. Asimismo, reclaman a Walmart que use su influencia política para abogar por cambios legislativos que eleven los estándares para la posesión de armas en Estados Unidos. El director y fundador de 'Guns Down America', Igor Volsky, ha dicho a Reuters que "el cambio legislativo federal tomará tiempo, pero cada día mueren más estadounidenses". "El tiroteo de El Paso ocurrió en su tienda, tienen la responsabilidad de ir más lejos", ha remarcado.

Por su parte, las políticas de Walmart se mantienen. Uno de los portavoces de la compañía ha asegurado a Reuters que la empresa no ha hecho ningún cambio en su política de venta de armas y que tampoco ha emitido ninguna directiva a sus tiendas para llevarlo a cabo. "Nuestro enfoque siempre ha sido ser un vendedor responsable de armas de fuego", señala el portavoz de la firma Randy Hargrove. "Vamos más allá de la ley federal, requiriendo que todos los clientes pasen un chequeo de antecedentes antes de comprar cualquier arma de fuego", ha concluido. Por último, la compañía se muestra sorprendida por estas peticiones, ya que otros vendedores de armas "no tienen políticas de restricción en cuanto a la venta tan severas como Walmart", según afirma la multinacional.

No es la primera vez que los defensores del control de armas han firmado una petición para que Walmart tome medidas. A principios de 2013, solo un mes después de que un hombre en Newtown matase a tiros a 20 niños y seis adultos en una escuela primaria, casi 300.000 personas firmaron una petición instando a la cadena de supermercados a dejar de vender armas de asalto.

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