China ha recaudado 6.000 millones de dólares este martes, en su mayor emisión internacional en esta divisa de bonos soberanos, a pesar de sus intentos por disminuir la influencia de la moneda de EEUU. Según los expertos, estos títulos ofrecen una interesante relación rentabilidad/riesgo.
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El ministerio de finanzas vendió los bonos en cuatro tramos. Una emisión de 3 años con un precio de 35 puntos básicos por encima del índice de referencia de los bonos del Tesoro de EE. UU. Un bono a 5 años con un precio de 40 pb por encima de los bonos del Tesoro, un de 10 años a 50 pb por encima de los bonos del Tesoro y un tramo de 20 años a 70 pb por encima de los bonos del Tesoro, dijo la fuente.
La emisión se produce después de una recuperación del mercado este año que ha llevado a los rendimientos de los bonos mundiales a un nivel considerablemente más bajo, disminuyendo significativamente el coste de financiación en comparación con su emisión anterior en dólares en octubre de 2018.
El total de 6.000 millones fue aproximadamente el doble del objetivo original y los libros de pedidos, o la demanda, de los bonos habían superado los 20.000 millones en los primeros compases del día, según el servicio de noticias de mercados de capitales Refinitiv IFR.
"Esta ha sido la mayor oferta de un emisor soberano asiático hasta la fecha", ha valorado Sam Fischer, jefe de mercados de capital de deuda China en Deutsche Bank, uno de los 13 bancos con el mandato de liderar la venta. El Ministerio de Finanzas de China señaló que la medida lo ayudará a mejorar su curva de rendimiento de bonos.
