El Banco Central de la República Argentina (BCRA) ha rebajado abruptamente los controles de capital para los hogares, reduciendo la asignación mensual para los reembolsos a 200 dólares. La medida supone un radical recorte con respecto a las medidas impuestas en agosto, que permitía compras de particulares hasta 10.000 dólares mensuales.
"Bienvenidos de nuevo al 'corralitito'", valoran los expertos de Aberdeen Standard Investments, por la dureza de la iniciativa, que también decreta límites para los compras en efectivo, cuyo monto será de 100 dólares que no son acumulativos e incluye todas las operaciones ya realizadas en octubre. Las personas humanas y jurídicas que no sean residentes podrán comprar hasta 100 dólares por mes.
Según medios locales, los argentinos ya esperaban una decisión de este tipo, pero se había especulado que lo máximo que ocurriría es que la cifra bajaría de los 10.000 a 1.000 dólares.
La misma institución habría afirmado que la decisión tiene carácter transitorio y se habla que tendrá efecto hasta diciembre de 2019, justamente cuando Alberto Fernández ganador de las presidenciales del país sudamericano tome posesión del cargo.
Con esta restricción, el banco central espera prevenir un desplome del peso que se teme supere el de agosto, cuando la divisa mayorista cayó a 62 pesos por dólar, mínimo histórico hasta la fecha. El mercado espera que se mantenga la presión cambiaria a la que se ha visto sometida la divisa en las últimas jornadas, aunque los expertos de Monex Europa sostienen que la moneda afronta con garantías el resultado electoral.
