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España es un país idóneo para un producto como la hipoteca inversa, dada la alta mentalidad de ser propietarios de una vivienda. Sin embargo, nunca ha llegado a cuajar del todo y hace unos años llegó a desaparecer del mapa. Entre las razones se encuentran la idea equivocada que se tiene de ella y el desconocimiento de sus funcionamiento y de sus ventajas fiscales.

La alta tasa de propiedad ha hecho que España se convierta en un "gran mercado potencial" de hipotecas inversas que, junto con la pensión pública, puede suponer un producto importante para cubrir las necesidades de la población durante el periodo de jubilación. Nuestro país está "indicado" para este producto, ya que aquí "el ahorro está materializado en vivienda".

Es lo que explican desde la firma especializada en hipotecas inversas Óptima Mayores, que asegura estar manteniendo contactos con varias entidades que piden asesoramiento. De momento, y gracias a un acuerdo con el banco portugués BNIE, las comercializa en España, donde desde finales del año pasado ha puesto a disposición de jubilados españoles unos 20 millones de euros. "Y pensamos canalizar otros 30 millones más hasta el próximo 31 de diciembre", ha precisado su consejero delegado, Ángel Cominges.

Pero aún tienen camino que recorrer. En cinco años "no ha habido ninguna entidad de crédito ni aseguradora que haya querido comercializar hipotecas inversas", afirman. Algo que puede empezar a cambiar. Hace unas semanas se conocía que Caser y Bankinter ya están estudiando la posibilidad de comercializar este producto en España. Nombres que Cominges ha confirmado. En caso de que finalmente se cierren los acuerdos, el desembarco en este negocio podría producirse después del verano.

El grupo asegura que actualmente tienen lista de espera para contratar este producto, por lo que es esencial aumentar los acuerdos con entidades financieras y aseguradoras para poder ampliar la capacidad. Pero, de momento, lo cierto es que la hipoteca inversa es un producto desconocido para la gran mayoría de la población y entre los pocos que la conocen, abundan los que tienen una idea equivocada de su funcionamiento.

Uno de los aspectos más desconocidos es que España es el único país de los que comercializan hipotecas inversas que ofrece ventajas fiscales por su contratación. "Hacer líquido el valor de la vivienda mediante productos financieros contribuye a paliar uno de los grandes problemas socioeconómicos que hay en España", por eso se regulan una serie de ventajas fiscales y de reducción de costes.

Por ello, y siempre que se cumpla con unos requisitos, las hipotecas inversas en nuestro país están exentas de la cuota gradual de Actos Jurídicos Documentados en sus escrituras de constitución, subrogación, modificación y cancelación, y gozan de una reducción de los honorarios registrales del 90% y de un tratamiento de 'documento sin cuantía' en el caso de los aranceles notariales. Además, el importe obtenido no tributa vía IRPF.

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