El grupo británico de supermercados Sainsbury's registró una caída de las ventas comparables del 4% en las 16 semanas hasta el 25 de junio impactadas por la debilidad general, ya que los consumidores con problemas de liquidez frenaron el gasto discrecional.
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Las ventas de comestibles cayeron un 2,4% respecto a los niveles del año pasado, que se vieron impulsados por el Covid-19, mientras que estuvieron un 8,7% por encima de las ventas anteriores a la pandemia. Las ventas de productos generales descendieron un 11,2%.
La compañía ha dicho que mantiene sus perspectivas sin cambios. Sigue esperando esperando un beneficio subyacente antes de impuestos para el ejercicio 22/23 de entre 630 y 690 millones de libras.
"Sainsbury's se enfrenta al doble golpe de un descenso en el crecimiento de las ventas comparables debido a la actual crisis del coste de la vida y a los resultados inflados de las restricciones del COVID del año pasado", indica Alex Smith, analista de Third Bridge.
"Con los continuos problemas de la cadena de suministro, nuestros expertos esperan que Sainsbury's se centre en los precios bajos diarios para los artículos clave de la cesta de la compra, protegiendo al mismo tiempo la disponibilidad de los productos de forma más general, en lugar de ir a por todas en la promoción de precios", añade.
Según Third Bridge, la compañía sigue siendo atractiva y ofrece un interesante margen de entrada dado que ha estado infravalorada durante mucho tiempo.
