- En la tarde de este jueves, el sindicato remitió a la empresa una propuesta de acuerdo para cumplir con el Plan de Empleo acordada. La respuesta fue entendida por los trabajadores como de 'nula voluntad de acuerdo'
- Las huelgas se producen en un contexto de campaña electoral, hecho que aumenta la presión sobre Fomento
Las huelgas de Renfe costarán cerca de 20 millones de euros si la empresa y los maquinistas no consiguen llegar a un acuerdo en los próximos días. El operador ferroviario, dependiente del Ministerio de Fomento, estima que cada jornada de huelga supone unas pérdidas de cinco millones de euros.
Tal y como informa El Mundo, las huelgas están convocadas para el 10, 12, 14 y 16 de junio. Las diferencias entre los maquinistas agrupados en el sindicato Semaf y la dirección de la compañía denuncian la credibilidad del presidente Pablo Vázquez es "nula" por incumplir todos los acuerdos suscritos.
Las diferencias entre los maquinistas del sindicato Semaf y la dirección de la compañía han llevado a huelgas previstas para el 10, 12, 14 y 16 de junio
En la tarde de este jueves, el sindicato remitió a la empresa una propuesta de acuerdo para cumplir con el Plan de Empleo acordada. La respuesta fue entendida por los trabajadores como de "nula voluntad de acuerdo".
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Desde la compañía señalan que el Plan de Empleo fue pactado para todo el año 2016 y, a 31 de mayo, han abandonado de la empresa 212 maquinistas y se han incorporado 199, lo que representa una cobertura del 94% de las bajas producidas hasta la fecha, detalla El Mundo. "Es el año que más personal vamos a contratar en los últimos 30 años. Más del 65% de las nuevas contrataciones serán maquinistas. En 2016 Renfe será la empresa pública española que más nuevos empleos va a generar", explicó, por su parte, un portavoz de la compañía.
Las huelgas se producen en un contexto de campaña electoral, hecho que aumenta la presión sobre Fomento
Las huelgas se producen en un contexto de campaña electoral, hecho que aumenta la presión sobre Fomento, que apunta que el colectivo acumula una media de siete días de huelga anuales desde 2005 y que, este año, amenazó con paros ya en Semana Santa para forzar la autorización por parte del Gobierno del convenio colectivo de la empresa. Una vez autorizado y firmado por el resto de sindicatos, los maquinistas se echaron atrás, desde entonces "se producen incidentes relacionados con maquinistas en tal número que demuestran con claridad la existencia de la huelga de celo".
En la jornada de paros de este viernes, Renfe denunció el incumplimiento de los servicios mínimos e incidencias en los trenes de cercanías de Madrid y Valencia. Ante esta situación optaron por recurrir al uso de autobuses y trenes de doble composición.
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