La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha abierto la posibilidad del rescate de Abengoa por parte del Gobierno si la compañía cumple con las condiciones de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), organismo dependiente del Ministerio de Hacienda y encargado de gestionar el fondo a empresas estratégicas de 10.000 millones de euros.
Durante su intervención en el Foro Turismo de Europa Press, Maroto ha explicado que "nosotros siempre estamos del lado de la empresa, que es estratégica para España. Ha pedido el rescate a la SEPI, si cumple las condiciones, se tomarán las decisiones que correspondan".
La titular de Industria ha reconocido que no sabe acerca del proyecto presentado por Abengoa, aunque ha afirmado que se trata de una empresa "estratégica", y ha aclarado que el Gobierno siempre ha protegido a los trabajadores de Abengoa.
"Este Gobierno siempre ha acompañado a las crisis industriales. En el caso de Abengoa, desde que estoy de ministra hemos aprobado dos rescates, en enero de 2019 y en septiembre de 2020, y han sido otros actores los que no han comprometido el acuerdo de reestructuración, y me estoy refiriendo a la Junta de Andalucía, que no puso los 20 millones que se requerían, pero luego ha anunciado que va a comprar la sede de Abengoa, algo que es difícil de entender", ha comentado Maroto.
Asimismo, ha indicado que al igual que el Gobierno asume las responsabilidades, también las exige a terceros. "Siendo una empresa andaluza, La Junta debería haber buscado los instrumentos para hacer un acompañamiento y hoy Abengoa estaría salvada si hubiera puesto los 20 millones que el acuerdo de reestructuración le exigía", ha apostillado.
Abengoa pidió a mediados de marzo el rescate para su sociedad Abenewco 1, a la que traspasó los activos y las actividades más valiosos de la matriz, por un importe de 249 millones de euros.
ABENGOA AGUA CONSTRUYE UNA DESALADORA EN OMÁN
La sociedad de agua de la compañía, Abengoa Agua, ha finalizado la construcción de la planta desaladora situada en la ciudad de Salalah, en Omán, para un consorcio formado por ACWA Power, Veolia y Dhofar International for Investment and Development Co SAOG.
La desaladora, que tiene una capacidad de 113.500 metros cúbicos diarios, comenzó a producir agua en diciembre de 2020 y, tras completar las pruebas de funcionamiento, ha iniciado su operación comercial en marzo de este año. Esta planta pretende reforzar el abastecimiento de agua potable al sur de Omán que padece problemas de escasez de agua.
La desaladora de Salalah ha supuesto un importante reto desde el punto de vista de su diseño y construcción, ya que es capaz de adaptarse a las condiciones climáticas cambiantes de la zona y al empeoramiento de la calidad de agua de mar, originados por el fenómeno meteorológico denominado “Khareef”. Este fenómeno, que ocurre durante los meses de verano, provoca un incremento de la actividad microbiológica que, unido a las precipitaciones, el viento y las olas, da lugar a un aumento significativo de los sólidos en suspensión, algas y turbidez del agua de mar.
