Una conexión A Coruña-Oporto que espera empezar a explotar en julio de 2019

VIGO, 20 (EUROPA PRESS)

Arriva Spain Rail, filial de la alemana Deutsche Bahn, espera recibir en un mes autorización para la conexión ferroviaria que pretende explotar en España en competencia con Renfe, una línea internacional entre A Coruña y Oporto.

Así lo indicó el consejero delegado de la firma, Juan Ignacio García, que ha solicitado que se electrifique toda la vía ferroviaria en la que plantea su servicio.

La firma alemana espera así tener en breve el visto bueno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a su propuesta de tren internacional después de que el 'superregulador' aprobara esta semana la conexión AVE Madrid-Montpellier planteada por Isla, una firma propiedad de los accionistas de Air Nostrum.

Las operadoras privadas piden entrar a operar en transporte de viajeros en tren en España con trayectos internacionales dado que en la actualidad es el único servicio que está abierto a la competencia, si bien permite hacer paradas y trayectos dentro del país. La liberalización del tráfico nacional está prevista para finales de 2020.

Los trayectos ferroviarios propuestos por Ilsa o Arriva se convertirán así en los primeros que se presten por parte de empresas privadas en España, donde actualmente Renfe tiene el monopolio de este mercado.

En el caso de Arriva, su primer ejecutivo manifestó su "optimismo" ante la posibilidad de lograr en un mes o mes y medio autorización de la CNMC a su servicio.

De esta forma, estiman que podrían comenzar a prestar servicio en julio de 2019, si bien ello dependerá de la electrificación de la vía y de si disponen de trenes de Renfe o tienen que buscar otro proveedor.

El consejero delegado de Arriva asegura que aumentar la oferta en esta zona, en competencia con el actual tren Celta Oporto-Vigo, reportará ventajas para los ciudadanos, como son la reducción de precios, el aumento de la demanda, el desarrollo del turismo y la mayor movilidad de los estudiantes. "Todo es positivo, y hace prever que nuestro servicio podrá ser operado", subrayó.

NUEVA RUTA.

En concreto, el servicio ferroviario de Arriva cubrirá un tramo total de 341,9 kilómetros en un tiempo de viaje de dos horas y 45 minutos, si bien se alcanzarían las tres horas en caso de que no se electrificara la vía.

La oferta de la compañía contempla realizar seis frecuencias diarias con paradas en A Coruña, Santiago, Vilagarcía de Arousa, Pontevedra y Vigo Guixar, en Galicia; y en Valença do Minho, Nine y Porto Campanha, en Portugal, si bien no descartan añadir otras.

Arriva contempla además agregar servicios de intermodalidad conectando con otras las localidades cercanas a estas paradas través del autobús. La compañía cuenta con una flota de 224 autobuses en Galicia y otros 230 en el Norte de Portugal.

Según su plan de negocio, la ruta puede contar con una demanda de entre 360.000 y 800.000 viajeros y aspira a captar parte de los viajeros que actualmente eligen el coche para realizar este recorrido.

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